"Hay que llenar a Rosario de lucecitas azules, completarla de patrulleros. No tenemos porqué aceptar una ciudad sin policías. Un móvil cada 15 mil habitantes o cada 170 manzanas; imposible verlos", se quejó ayer el intendente Pablo Javkin al decir que sólo 70 vehículos patrullan las calles (hay otros 70 en puntos fijos). Así, hizo un repaso por lo hecho en seguridad en las tres esferas del Estado y con una clasificación que dividió aguas: "Lo que acordamos" y lo que "no acordamos". El titular del Palacio de los Leones reclamó además: "Rosario debería llegar a 5.100 policías, por lo que habría que sumar al menos 1.000 más".
La presentación de ayer en Buenos Aires 511 tuvo a Javkin como orador mientras que las filminas en una gran pantalla apoyaban con datos "lo que estamos haciendo, lo que falta y exigimos que hagan" en materia de seguridad. En definitiva, su exposición fue el resultado de lo que la Intendencia puso sobre la mesa en la denominada reunión de los lunes donde asisten funcionarios del municipio, provincia, policía y fuerzas federales.
En el haber, repasó tareas propias y conjuntas en temas como la urbanización de barrios, instalación de luces led y escamonda del arbolado; la creación de la agencia antilavado, prevención de consumos problemáticos, alarmas comunitarias, la identificación de 360 mil patentes diarias por cámaras y tótems, y operativos multiagenciales, además de obras junto al Cuerpo de Ingenieros del Ejército, como la realización de calles y tareas hídricas en Tío Rolo. También se contabilizó la incorporación de tecnología para desbloquear celulares incautados y el peritaje balístico en la delegación de la Policía Federal, la clausura de 52 chatarrerías, los puntos fijos contra los cuidacoches que realizan extorsiones, la ley de víctimas y la sede de la UIF.
Un móvil cada 15 mil rosarinos
El intendente fue más enfático cuando llegó al capítulo de "lo no acordado". El famoso "debe" de la contabilidad donde se puntualizaron las falencias y carencias detectadas en seguridad. El rasgo fundamental fue la falta de patrulleros. En este sentido, dijo que hay 70 para custodia de objetivos fijos ordenados por la Justicia y sólo otros 70 para el patrullaje de las calles de Rosario, que tiene un total de 18 mil cuadras y 12 mil manzanas urbanizadas. Es decir, cada patrullero tiene asignadas 258 cuadras o 170 manzanas; un patrullero cada más de 15 mil habitantes. "La gente dice que no se ve la policía y tiene razón. Es imposible”, reforzó.
"Rosario debería llegar a 5.100 policías, por lo que habría que sumar al menos 1.000 más", le dijo a La Capital Javkin tras la presentación. En los datos oficiales se reportan en el departamento Rosario 4.182 uniformados de la Unidad Regional II.
Antes había reclamado la concreción de más aporte de fuerzas federales. "Se duplicaron las raciones de alimento, y tenemos que ir por el triple o el cuádruple. Porque además de los hechos en los barrios, donde están establecidas, necesitamos más fuerzas federales activas”, dijo.
También hubo en las filminas datos de otras poblaciones. Ciudad de Buenos Aires (Caba) tiene 1.048 patrulleros, es decir, 1 cada 2.977 habitantes; Lomas de Zamora: 400 patrulleros, 1 cada 745 habitantes; Córdoba: 210 patrulleros, 1 cada 10.032 habitantes; Esteban Echeverría: 84 patrulleros, 1 cada 3.571 habitantes. Pero Rosario con 70 patrulleros activos tiene una relación de un móvil cada 15.740 rosarinos.
Policías por cada ciudadano
Luego llegó el capítulo la proporción de efectivos por cada ciudadano. El departamento Garay tiene 1.136 cada 100 mil habitantes. En el departamento La Capital hay 479 cada 100 mil habitantes. Sin embargo en el departamento Rosario: 321 cada 100 mil habitantes. Se puede concluir que la ciudad tiene el 25 por ciento de Garay y un 30 por ciento menos que la capital provincial.
“No podemos aceptar ser una ciudad que no tiene policía. Hay que llenar la ciudad de patrulleros; no podemos aceptar que Rosario no tenga policías. Hay más patrulleros en el departamento Garay o más agentes de investigación criminal en un lugar donde no hay delitos. Se habla de la situación en Rosario, pero se ponen a los policías en otro lugar”, se ofuscó Javkin para subrayar: "El ministro (de Seguridad de Santa Fe) Claudio Brilloni se rompe el alma, pero le tienen que dar recursos”.
Les pagan pero no van
En tal sentido, el jefe comunal introdujo la cuestión de la remuneración a los uniformados y el porcentaje de ausentimo en tareas de custodia de edificios públicos. Si bien aclaró que "el policía de calle tiene que tener un incentivo para actuar", el intendente volvió con un dato: los policías adicionales que contrata la Municipalidad tienen un 35 por ciento de ausentismo. "La ciudad contrata un policía para que acompañe a una chatarrería, y el ausentismo es porque el valor de la hora adicional que fijan es muy bajo y le pagan con una enorme demora”, indicó.
A la hora de desmenuzar las brigadas, también hubo críticas. No hay coordinador de escena del hecho, y otros distritos de la provincia "tienen más policías de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) que Rosario”, aseguró.
Otro tema recurrente en el diagnóstico fue la situación carcelaria. Existen unos 37 delincuentes que regresaron o regresarán al territorio rosarino en 2023, y existen 16 salidas transitorias vigentes, 9 libertades asistidas, condicionales o vencimientos de condena, y 12 vencimientos de condenas o libertades asistidas planificadas para este año. "El seguimiento posterior de los delincuentes, la evaluación de la libertad condicional es la paz o la muerte en un barrio. Eso que sufren los vecinos, tiene su explicación en esto. ¿Cómo los controlan?" preguntó con énfasis.
Y si bien hace casi un mes se instaló en Piñero un scanner de alta tecnología para controlar el ingreso a este penal, también se dejó en la exposición la preocupación de lo que se conoce como los "call center" del delito callejero.
“Están presos y organizan circulación de armas o comercializan estupefacientes. No cambió. No tenemos ninguna novedad", señaló el jefe comunal en materia de lo que están haciendo desde la Subsecretaría de Asuntos Penitenciarios del Ministerio de Justicia de la Nación.
Para cerrar su oratoria, hubo otro pedido idéntico al de abril del año pasado. “Déjennos designar a los jefes policiales y controlar a la policía", reclamó a un proyecto que cuenta con media sanción en Diputados desde agosto pasado y no se movió en el Senado santafesino.
"No se entendió la consigna"
La ministra de Gobierno de Santa Fe, Celina Arena, defendió la convocatoria que hizo el gobernador Omar Perotti a los equipos técnicos de los precandidatos a gobernador de abordar asuntos vinculados a la seguridad y aseguró que quienes criticaron la iniciativa “evidentemente no entendieron la consigna”.
“No es para elaborar un plan de seguridad, eso dependerá de la propuesta electoral de cada uno de los postulantes", se atajó la ministra Arena, y agregó: "La convocatoria se hizo con la convicción de que es muy importante en este proceso electoral elevar el piso de la discusión respecto de un tema tan importante, como muchos otros, pero tan neurálgico en Santa, Fe como es el tema de la seguridad”.
Asimismo, destacó que de la iniciativa participará el ministro de Seguridad, Claudio Brilloni. “La idea es que, en conjunto con las universidades y otras instituciones abocadas a esta problemática, podamos trabajar en cuáles son las herramientas que existen, los desafíos que quedan por delante de incorporación de tecnología, de formación y de perfeccionamiento de las fuerzas de seguridad y del Servicio Penitenciario”.
Para justificar aún más esta invitación, la funcionaria consideró “muy importante que quien asuma el 10 de diciembre sepa el estado de situación con la participación de quienes están involucrados no sólo a nivel del Poder Ejecutivo, sino también de las distintas instancias del Poder Judicial. Que durante estos meses podamos hacer un acuerdo básico en cuestiones en que coincidimos en muchos casos. Para elevar el piso de la discusión hay que generar compromisos que tengan que ver con consensos alrededor de temas estratégicos”.
Finalmente, Arena dijo que “hay mucho que discutir y muchas personas que hablan como si no hubieran tenido responsabilidad en la situación en la que estamos hoy, porque el nivel de complejidad de la narcocriminalidad tiene que ver con la cantidad de años en que se viene produciendo en Santa Fe”.