La violencia es, desde hace tiempo, un problema que angustia a los rosarinos. En este marco, varias cocheras céntricas que antes abrían las 24 horas tomaron la decisión de achicar su horario de trabajo y cerrar por la noche por falta de seguridad. Entre los motivos, trabajadores y dueños explicaron que no consiguen personal que cumpla tareas en el horario nocturno y que muchos clientes tienen temor a que los asalten mientras cierran el portón.
La Capital consultó a distintos estacionamientos de la zona centro de la ciudad. “Las cocheras nocturnas están cerrando porque no se consigue gente que quiera trabajar en ese horario. Al personal le da miedo que entre alguien a robar. Antes estábamos abiertos las 24 horas, pero como no se encontró gente se optó por cerrar a la noche”, explicó Franco Aquino, empleado de una cochera ubicada en el microcentro, más precisamente sobre calle Entre Ríos.
Con respecto a los clientes, Aquino resaltó: “Había mucha demanda, mucha gente que vivía cerca. Acá teníamos un sereno con portón cerrado que le daba seguridad a los clientes, pero cuando decidimos no abrir más a la noche tuvieron que salir a buscar otra cochera y los que no encontraron decidieron dejar el auto en la calle”.
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Cocheras en el centro de Rosario. En el Concejo se discute la modificación de la ordenanza.
Un parking de la zona que ofrecía servicio en horario nocturno también empezó a cerrar por la noche, pero en el lugar manifestaron que no fue por una cuestión de seguridad. Sin embargo, reconocieron que, unos días atrás, el estacionamiento sufrió un robo alrededor de las 17, en el que un asaltante que estaba armado se llevó el dinero de la caja registradora.
“Una de las razones fundamentales por la que dejamos de trabajar a la noche tiene que ver con la inseguridad. La gente tenía miedo de cerrar el portón y que se metiera alguien a robarle”, reveló Andrea García, trabajadora de otro estacionamiento céntrico, ubicado sobre calle Urquiza.
La preocupación no aparece sólo con la llegada de la noche. Desde una de las cocheras de la zona que trabaja con horario diurno y sin estadías mensuales, resaltaron como un eje importante a la seguridad. Mauricio, uno de sus empleados, detalló: “Las personas que vienen a trabajar al centro prefieren pagar un estacionamiento en vez de dejar el auto en la calle y que les abran el baúl y les saquen todo”.
Y continuó: “Hay mucha gente que tiene moto y que le conviene venir a trabajar en ese vehículo, pero como es inseguro, prefiere moverse en auto. Si hubiera más seguridad sería todo distinto, hoy en día las cocheras no dan abasto con la cantidad de autos que hay en la calle".
Entre las consecuencias que trae esta situación, se encuentra la alta demanda de los vecinos por conseguir una cochera nocturna para que el auto duerma tranquilo sin temor a sufrir un robo. Los que no consiguen estacionamiento se anotan en las largas listas de espera y optan por el camino de contratar un seguro contra todo riesgo dejando el vehículo en la calle, aunque siempre atentos a que posiblemente surja algún inconveniente.