Hubo fumata blanca. Después de un largo litigio que enfrentó a la modelo rosarina Amalia Granata y al futbolista Cristian Fabbiani, ambos sellaron ayer un acuerdo en el marco de una audiencia de conciliación en los Tribunales de Rosario bajo la coordinación del Centro de Mediación del Poder Judicial. Limaron asperezas respecto a una deuda por la cuota alimentaria y el régimen de visitas para Uma, la hija de ambos.
El trámite se realizó a raíz de una causa penal que Granata le inició al padre de la chiquita por incumplimiento de los deberes de asistencia familiar e insolvencia alimentaria fraudulenta.
Los dos llegaron puntuales a la audiencia final programada, a las 11, en el tercer piso de Balcarce 1663, donde los esperaban los mediadores que tuvieron la tarea de buscar una solución "pacífica" a las diferencias que enfrentó a la ex pareja durante al menos cuatro años, luego de su separación.
Fabbiani, con muletas tras una operación de ligamentos de la rodilla izquierda, jeans gastados y un sweater azul, fue el primero en arribar acompañado por sus abogados, Carlos Varela y Adrián Martínez. Cuando estaba a punto de ingresar al edificio, apareció Amalia, elegante, con una camisa suelta color cobre, pantalones negros y suecos.
En ese momento, dos cronistas del programa "Antes que sea tarde" (que va por América), donde Granata es panelista, oficiaron de celestinos y lograron que la modelo y el futbolista se dieran la mano. Un anticipo de la buena predisposición con la que ambos llegaron a la audiencia.
El futbolista se mostró distendido y subió al tercer piso por el ascensor. La conductora, con sus abogados Graciela Abud y Eduardo Edwards, prefirió ir al bar de la planta baja de Tribunales, atestado de profesionales que no dejaron de mirar la figura carismática de la ex Gran Hermano.
A las 11.20 la ex pareja ingresó al recinto de la mediación, prácticamente sin hacer declaraciones. Sólo Fabbiani balbuceó: "Sí, quiero terminar con esto".
A las 15.10, y después casi cuatro horas de deliberaciones, salieron sonrientes, pero evitaron mostrarse juntos.
Fabbiani expresó: "Ya está todo arreglado, a mí déjenme con el fútbol", y le cedió la palabra a su abogado. Varela explicó que el acuerdo se sustentó en "los montos adeudados por cuota alimentaria, régimen de vistas y el compromiso de Amalia de no proseguir con la causa penal que le inició a Cristian. Hubo muy buena voluntad de ambas partes y se llegó a un resultado exitoso de la mediación".
En tanto, la letrada Abud, de la otra parte, agregó que "todo se resolvió de común acuerdo: la cuota alimentaria de Uma y un amplio régimen de visitas para que nadie pierda contacto con ella", además de las costas de los abogados.
Amalia no ocultó su satisfacción y se mostró aliviada. "Por suerte se cerró una etapa negativa de cuatro años. Las mediadoras hicieron un buen trabajo, estuvimos a solas y pudimos expresar diferencias personales que antes no lográbamos superar".
Al menos en el ámbito judicial, quedó resuelta una relación conflictiva entre la mediática pareja.