Luego de tres años de haber interrumpido los trabajos, la Municipalidad continuará a partir de hoy la parquización de bulevar Oroño. Para eso, se establecieron seis meses de obras, pero calculan terminarlas en menos tiempo. Así, se podrá concluir un ambicioso proyecto destinado a embellecer al máximo unas de las arterias más lindas y la más señorial que tiene la ciudad. Y no sólo eso, se repondrán 40 especies arbóreas, entre ellas muchas palmeras que se secaron y hasta se cayeron con el paso del tiempo.
Según pudo saber La Capital, no se colocarán árboles pequeños, como en el resto de la ciudad. La licitación contempla especies de por lo menos cinco años, de una altura considerable, más robustas y de troncos más resistentes.
Las acciones que se iniciarán hoy contemplan un total de ocho cuadras. El parquizado irá desde Catamarca hacia la avenida Estanislao López, a la vera del río, e incluirá también el cantero de Montevideo a Pellegrini, que también había quedado sin ser intervenido.
Las cuadras donde se trabajará estaban originalmente incluidas en el “plan de revitalización” que lanzó el municipio en 2019, pero los trabajos no se concretaron. Por eso, en los últimos años el contraste entre los tramos terminados y el resto de Oroño quedó claramente en evidencia. Senderos con plantas cuidadas, riego artificial y mobiliario en condiciones contra sectores de tierra con baldosas y entorno deteriorados.
Interrumpido
El programa general para revitalizar el cantero central de Oroño, ideado en la administración municipal anterior, incluía las 20 cuadras desde Pellegrini al río. Durante 2019 se avanzó, pero luego se cortó de forma abrupta y no logró seguir más allá de Catamarca, mientras que en el otro extremo del bulevar no se ejecutó la última cuadra hasta Pellegrini. El Ejecutivo local sólo completó la instalación de luminaria led.
De inmediato, llegó la pandemia y todo quedó en un limbo, hasta que finalmente hubo que relicitar porque, entre otras cosas, los precios habían quedado desactualizados. Ahora, el presupuesto es de 75.778.981 pesos.
Cada uno de los canteros centrales donde los trabajos quedaron pendientes serán parquizados, pero además se completarán los faltantes de césped, arbustos y especies arbóreas en otros tramos. En efecto, las tareas totales comprenden: plantación de arbustos, árboles y palmeras, colocación de césped, sistema de riego por aspersión y por goteo, mantenimiento de “románticas” y señalética, bacheo en veredas de los canteros y reparación del mobiliario urbano.
"Debíamos concluir estos trabajos”, dijo a este diario el coordinador general del gabinete municipal, Rogelio Biazzi, antes de agregar: “Oroño es una de las arterias mas representativas y tradicionales de la ciudad”.
A su turno, el secretario de Ambiente y Espacio Público, Nicolás Mijich, dio detales de la realización: “Se trabajará en dos o tres frentes en forma simultánea y vallando media mano de los canteros para no interrumpir el paso de los peatones”. De este modo, se irán alternando los trabajos hasta completarlos.
Los elementos del obrador se irán montando también hoy ya que quedaron acopiados en la calle producto de las lluvias de las últimas horas que impidieron continuar las acciones.
Las palmeras secas y la plantación en espejo
La palmera que se secó y quedó completamente doblada sobre sí misma en Oroño entre Brown y Güemes, en septiembre del año pasado, puso en debate el estado de estos centenarios ejemplares que caracterizan al bulevar. Ayer, el secretario de Ambiente, Nicolás Mijich, ratificó que el hecho mencionado se debió a la presencia de un hongo, pero dijo que no es lo único que ataca a las palmeras.
Las especies sufren también una enfermedad que puede ser bacteriana o citoplasma y también son atacadas por plagas.
Sin embargo, los árboles faltantes se repondrán en el marco de la revitalización del bulevar. Serán alrededor de 40 y no sólo palmeras (en principio iban a ser menos, pero calcularon que otras 10 especies resultaron afectadas en el último tiempo).
Esta replantación tiene una anécdota que merece contarse. No sólo se pondrá ejemplares que actualmente están secos o a punto de secarse, sino que se hará lo propio con otros desaparecidos a lo largo de los años.
La Municipalidad pudo conocer cuáles son y dónde estaban gracias al aporte del arquitecto Edmundo Poggio quien, en base a su observación y afición, logró saber que los árboles de Oroño estaban plantados en espejo, cuadra por cuadra. Así, presentó un croquis a la Secretaría de Ambiente y sus autoridades le dieron curso a la recuperación de la historia paisajística de este tramo de la ciudad.