Entre las tareas remanentes que le quedaron a la policía de la ciudad entrerriana de Gualeguaychú, tras el multitudinario recital del Indio Solari desarrollado el sábado pasado, figura la de ayudar a la localización de 20 jóvenes que, hasta anoche, 72 horas después del evento, no habían arribado a sus casas.
Fueron 170 mil las almas presentes en el impactante evento musical que sacudió a la ciudad acostumbrada al turismo y a las multitudes, aunque no en tamaña proporción. El comercio y los habitantes tratan de recuperar la normalidad luego de horas alteradas, donde masas de jóvenes arrasaron con aprovisionamiento de comida y servicios sanitarios.
Oficiales de la policía confirmaron ayer que hay 20 jóvenes que son buscados, y brindaron sus identidades. Es que en la mayoría de los casos son los padres de los jóvenes y en algunos otros de adolescentes, quienes se comunicaron a la Jefatura de la Policía de Entre Ríos, con sede en Paraná, y a la comisaría de Gualeguaychú, para averiguar su paradero.
"No podemos decir que son de-saparecidos, son extraviados, sucede que están tardando en volver a sus casas", explicó a La Capital el comisario Roberto Carante, de la Jefatura de la Policía de Gualeguaychú.
"Algunos ya van llamando que han regresado, hay chicos que se han extraviado, que vinieron en grupos que los dejó el colectivo, se desencontraron, entonces quedaron deambulando en la zona y no han podido transportarse", detalló.
Las complicaciones se sucedieron por la falta de comunicación con las familias, ya que algunos chicos quedaron sin batería en los teléfonos, sin dinero para efectuar una llamada, sin combustible en los automóviles, o simplemente desencontrados de sus grupos de amigos.
El barro, la noche y las distancias les jugaron en contra.
"Por ejemplo, hace un rato determinamos que uno de los que buscábamos estaba en un parador camino a Buenos Aires, y el auto no arrancó más. Mientras que algunos van llamando que ya han regresado. Pero sí, efectivamente hay gente extraviada, son 20 aproximadamente", confirmó el comisario.
"Se han ido de acá y han quedados varados en algún otro lugar, y ahí quedan entonces no se comunican con los padres, no avisan, se quedan sin un peso", agregó.
El comisario Carante igual indicó que la situación no es para preocuparse en demasía. "Acá no ha pasado nada en la ciudad, todo controlado, no ha pasado nada extraño. Para resolver esto se ha conformado un grupo de tareas de búsqueda, y se mantiene contacto con llamados de familiares. Se busca a toda esta gente que ha venido a esta ciudad y esperemos que les quede un recuerdo grato para volver".
Entre los buscados, algunos de los cuales ya volvieron a sus hogares, la policía conformó una lista en la que figuran: Héctor Mauricio Miranda, Julio Balbuena, Esteban Rubén Pacheco, Agustín Ocampo, Ismael Schaap, Maximiliano Ibargoyen, Adrián Antelef, Leonel Sosa, Marcelo Tabárez, Damián Alegre, Ramón Sequeiro, Alexis Oliva, Roberto Robledo, Juan Manuel Torres, Fredy Noel Villalba Sánchez, Luis Figueredo, Javier Nahuel Fernández, Diego Balbuena, Julio Abel Palavecino y Agustín Mouyau.
Rosarinos presentes. Miles de rosarinos participaron del pogo más grande del universo. Algunos de ellos aceptaron dejar el testimonio de su experiencia a La Capital.
Lisandro señaló que "lo que pasó arriba del escenario realmente fue bueno, el sonido muy superior al de Mendoza, pero lo ocurrido en el campo fue desastroso, era un completo barrial y había grandes sectores con mucha agua. Otro punto muy flojo fue la salida. No podés pretender que por el mismo sector que entran 170 mil personas en cinco horas, salgan en media hora. Tenían que habilitar más salidas".
Para Carlos, que concurre a los shows del Indio desde cuando los Redondos presentaron "Oktubre" en Sportivo América en Rosario, "hubo un enorme déficit organizativo. El Indio está encaprichado en hacer un solo show. Los Rolling Stones hacen cinco River porque saben que con uno solo dejan mucha gente afuera".
En cuanto al ingreso, dijo que fue "una locura" que los hayan hecho caminar 50 cuadras por una sola calle.
Matías, por su parte, dijo: "El barro fue un gran problema. El factor climático escapa de los controles, está bien, pero se debería haber previsto qué hacer ante semejante situación".