Cuatro personas murieron ayer y otras 48 resultaron heridas, entre ellas dos turistas argentinas que sufrieron lesiones leves, al descarrilar un tren de pasajeros en las inmediaciones de la estación del municipio gallego de O Porriño, en el noroeste de España.
El convoy accidentado, llamado Tren Celta, cubría el trayecto entre Vigo y la ciudad portuguesa de Oporto y está gestionado de forma conjunta por Renfe, la empresa pública ferroviaria española, y su homóloga portuguesa Comboios de Portugal.
En la formación viajaban 63 pasajeros además del maquinista, que era portugués, y el interventor, español, ambos fallecidos como consecuencia del accidente, informó Renfe.
El descarrilamiento se produjo en torno a las 9.25 hora local (4.25 de Argentina) en las cercanías de la estación de tren de la pequeña localidad de O Porriño, situada a 20 kilómetros de Vigo, y donde el tren no tenía parada.
El tren accidentado, que tiene unos 30 años de antigüedad —de serie 592—, tenía tres vagones, uno de los cuales quedó volcado y los otros dos semivocalcados.
El siniestro se generó por causas que por el momento se desconocen tras su paso por debajo de un puente, contra el que aparentemente chocó, y luego impactó contra una enorme torre eléctrica.
En la zona del accidente se estaban realizando obras de mantenimiento, de acuerdo con las autoridades españolas, por lo que los trenes estaban obligados a transitar por una vía provisional y bajar la velocidad a unos 30 kilómetros por hora.
El consejero de Sanidad de Galicia, Jesús Vázquez Almuiña, explicó que tres personas murieron en el lugar del siniestro, el maquinista portugués, el interventor español y un turista estadounidense, y que un joven de 23 años de la ciudad de Vigo falleció tras ser trasladado al hospital.
"Entre los heridos hay portugueses, americanos, alemanes y sudamericanos, de Chile y Argentina. Muchas eran personas que iban de Vigo a Oporto a pasar el día", apuntó Vázquez Almuiña tras visitar uno de los hospitales a donde fueron trasladadas las víctimas.
"Han sido atendidas 48 personas, ya se han dado de alta a once pacientes, siguen en urgencia otros 27 y han sido internados otros nueve, pero ninguno de ellos reviste gravedad", explicó el responsable de sanidad gallego.
"La mayoría de los heridos ingresados tienen fracturas y otros traumatismos, pero no se teme por la vida de ninguno de ellos", remarcó.
Por su parte, la consul de argentina en Vigo, Silvina Montenegro, aseguró en declaraciones a Télam que los heridos de nacionalidad argentina son "dos mujeres que resultaron heridas leves, que no revisten gravedad".
"Son turistas, ya tomaron contacto con sus familias y no requieren ninguna asistencia especial. De todas formas, estamos en contacto con ellas y lo más importante es que están bien", añadió la responsable consular.
Entre los heridos figuran 26 españoles, dos argentinos, seis estadounidenses, dos brasileños, dos uruguayos, tres portugueses, un inglés, un alemán y un chileno, de acuerdo con la prensa española.
Adif, la empresa gestora de las infraestructuras ferroviarias españoles abrió una investigación para determinar las causas del siniestro, y el Tribunal Superior de Justicia de Galicia informó que ya se extrajo la caja negra del tren.
El ministro de Justicia español, Rafael Catalán, quien también gestiona la cartera de Fomento, aseguró que el tren había pasado el jueves la revisión técnica y que "cumplía con todas las garantías".
En tanto, el presidente de Combois de Portugal, Manuel Queiró, indicó que el tren "cumplía con todos los requisitos de seguridad" y "no era muy antiguo", por lo que "hay condiciones anormales que justifican el accidente que hay que investigar".
Algunos testigos presenciales y víctimas del accidente afirmaron que el tren iba "a bastante velocidad y frenó bruscamente", según declararon a la prensa española.
A raíz del accidente ferroviario los partidos gallegos suspendieron la campaña electoral de cara a las elecciones regionales del próximo 25 de septiembre.
El presidente del gobierno regional de Galicia, el conservador Alberto Núñez Feijóo, se trasladó de inmediato al lugar del accidente, donde dio sus condolencias a las familias de las víctimas.
Hace tres años Galicia fue escenario de otro accidente ferroviario que conmocionó a la sociedad, cuando un tren descarriló en una curva cerca de Santiago de Compostela dejando 80 muertos y más de 140 heridos. El conocido como "caso Alvia" tiene un solo imputado, el maquinista del tren.