El gobierno de Jujuy garantizará que hoy se interrumpa el embarazo de 24 semanas de una niña de 12 años víctima de abuso sexual por parte de un vecino de 60 años. El caso generó polémica entre los grupos Pro-Vida y miembros de la iglesia jujeña que exigen que no se realice el aborto.
El gobernador Gerardo Morales confirmó que se respetará el derecho de la víctima de violación y opinó que el caso contempla "las tres causales que prevé el Código Penal que autorizan y legalizan la interrupción del embarazo".
"Vamos a cumplir inmediatamente el fallo de la Corte y el articulo 86 inciso 2 del Código Penal (...), con lo que he dado las instrucciones para que en lo inmediato se actúe", declaró Morales en una entrevista con TN.
Sin embargo, el ministro de Salud de Jujuy (dependiente de Morales), Gustavo Bouhid, dijo que lo que hoy se practicará será "una cesárea" porque "se intentará que si el niño nace con vida tenga la posibilidad de quedar en el servicio de neonatología".
Desde la Campaña para el Aborto Seguro, Legal y Gratuito llamaron a concentrarse frente a las puertas del Hospital Materno Infantil de Jujuy —donde se encuentra internada la niña— para exigir que se cumpla con el aborto legal previsto para estos casos.
"Está mal planteado el caso —exclamó el ministro Bouhid—. El gobernador Morales no ordena la interrupción legal del embarazo, lo ordena la Justicia a través del fiscal, y la provincia tiene un protocolo para estos casos. El ejecutivo provincial lo que hace es garantizar el derecho de las personas", dijo.
La intervención se realizará a las 10 en medio de una fuerte controversia. La niña fue violada por un vecino, quedó embarazada, lo ocultó por amenazas, hasta que fuertes dolores abdominales alertaron a su familia, que la llevó al Hospital Guillermo Paterson de la localidad de San Pedro.
Desde el Paterson, advirtieron que se trataba de un caso complejo y derivaron a la pequeña a la Maternidad Provincial de San Salvador de Jujuy. Luego de examinar a la menor, se comprobó que la víctima llevaba un embarazo de 23 semanas. .
Ante el diagnóstico, los padres, que aseguran haberse enterado del estado de su hija el pasado fin de semana, intentaron acelerar un aborto, mientras que las autoridades de la Maternidad decidieron en la mañana del miércoles suspender la interrupción del embarazo.
"Se trata de un caso muy delicado y peligroso para la menor. Lo más aconsejable para la salud de la niña y el bebé es un parto inducido, pero dentro de dos semanas", habían señalado desde el centro de salud. "Inducir el parto en este momento puede generarle al bebé una parálisis cerebral", puntualizó Gustavo Briones, jefe de la maternidad.
La madre de la nena pide la interrupción del embarazo y acusa a los médicos de haber efectuado una una dilación premeditada.
"Mi hija me contó que un día estaba jugando afuera y el vecino le pidió ayuda para meter una mesa a su casa. Ella fue y el hombre la agarró, le tapó la boca y la metió para adentro. Abusó de ella y la amenazó que iba a matarla a ella y a toda la familia si le contaba a alguien", manifestó la mamá en medio del dolor. El presunto abusado fue detenido el sábado.
El miércoles temprano se difundió un comunicado del Obispo de Jujuy, César Fernández, desde Roma, donde se encuentra por trabajos de la Comisión de Ministerios de la Confederación Episcopal Argentina: "Rogamos que el caso se resuelva de la mejor manera, sin aumentar dolor al dolor, salvando las dos vidas". Y pidió a toda la comunidad "una oración para que prevalezca la vida sobre la muerte".
Mientras, en las puertas de la Maternidad Provincial, nutridos sectores de los grupos Pro Vida y Pro Aborto provocaron una serie de desmanes que fueron controlados por las autoridades jujeñas.
"Estamos preocupadas por la vulneración de derecho de esta niña que es víctima de un delito penal, que es un abuso, y que producto de ello está embarazada", expresó una de las voceras de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto en Jujuy. "Lejos de ser asistida y acompañada, esta niña víctima de violación se encuentra siendo revictimizada y evaluada por la moral del equipo médico que debería estar a su servicio".
Por su parte, el agente fiscal de turno, José Alfredo Blanco, subrayó que el tema no es de su competencia, que "la decisión debe tomarla la familia y los médicos, por lo que la fiscalía no intervendrá".
discusión. Los grupos pro aborto y anti aborto se gritan en las puertas del Hospital Materno Infantil de Jujuy.