El Ejército de Israel ha confirmado este domingo que al menos 155 personas están retenidas como rehenes desde el asalto lanzado por Hamás el pasado 7 de octubre, poco después de que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, se reuniese por primera vez con familiares de algunos de estos desaparecidos.
Un portavoz militar, Daniel Hagari, ha indicado que ya han informado a un total de 155 familias. "Sé que cada segundo es una eternidad, (pero) haremos todo lo posible para que sus seres queridos puedan volver a casa", ha prometido.
Netanyahu también ha trasladado a las familias de los israelíes secuestrados que su liberación es uno de los objetivos de la ofensiva terrestre que ultima estos días el Ejército, para la que no existe fecha cerrada, según familiares citados por el diario Haaretz.
Entre las 155 personas secuestradas por Hamas hay 15 argentinos, cuyas familias también están buscando con desesperación.
De algunos de ellos se sabe que fueron tomados como rehenes por la agrupación terrorista, pero hay otros de los que no se sabe nada.
"Ya hay al menos 15 argentinos que no fueron localizados", según afirmó el canciller Santiago Cafiero esta semana.
Una familia entera desapareció en el kibutz Nir Yitzhak
Clara Marman, de 63 años se encontraba con su pareja, Luis Har (70); su hermano, Fernando Marman (60) y su hermana, Gabriela Leimberg (59) en el kibutz Nir Yitzhak, situado a unos diez minutos de la Franja de Gaza. Allí también estaba Mia Leimberg, adolescente de 17 años nacida en Israel.
Cuando comenzaron los ataques Clara se comunicó con sus hijas Mayan y Gefen y su último mensaje fue: "Están en casa, están rompiendo cosas". No se supo más de ellos.
Ron Scherman, el sobrino de Gieco
“Pido por el regreso de todos los rehenes a sus lugares. En mi caso particular, pido por la vuelta de mi sobrino Ron Scherman, por el amor que nos une como familia, y por el amor universal”, publicó León Gieco en sus redes sociales.
Ron, de 19 años, estaba cumpliendo con tareas administrativas dentro del ejército, ya que estaba cumpliendo con el servicio militar obligatorio. El día del ataque se mantuvo escondido hasta que le escribió a su padre, Alex Scherman: "Terminó todo, los quiero mucho".
Alex, luego, vio videos compartidos por Hamas en los que se veía a su hijo secuestrado junto con otros dos compañeros.
Ofelia Feler de 77 años, no se sabe nada de ella
Ofelia Feler de Roitman, de 77 años, se encontraba el sábado en su casa del kibutz Nir Oz, donde reside desde 1985. Su esposo Héctor no estaba porque permanecía internado recuperándose de una operación de cadera.
Ella le escribió a su familia cuando comenzaron los ataques, hasta que quedó incomunicada. “Habrá sido el momento en que entraron los terroristas y se la llevaron. Desde el sábado a la mañana no se sabe nada de ella”, contó el relator y periodista deportivo Hernán Feler, sobrino de Ofelia, según reconstruyó La Nación.
El secuestro de una familia registrada en video
También en el kibutz Nir Oz, Karina Engelbert, cordobesa de 50 años, le envió en la mañana del sábado un último mensaje a su hermana Paola: "¡Entraron! Están adentro". Ella estaba junto Ronen Engel (54) y sus hijas Mika (19) y Yuva (11). Hace una semana que no se sabe de ellos.
Un agricultor secuestrado
José Luis Silberman, de 67 años, trabajaba en los cultivos del kibutz Nir Oz y el sábado, fue secuestrado por Hamas junto a su esposa Margit, su hija Shiri, su yerno Yaden y sus nietos Ariel, de tres años, y Kfir, de 9 meses. Su situación se conoció porque quedó registrada en un video difundido por Hamas.
Iair y Eitan, dos hermanos desaparecidos
Iair Horn, de 45 años había recibido la visita de su hermano menor, Eitan Horn, de 37 en el kibutz Nir Oz. "Cuando llamaba, no me contestaban por WhatsApp, ni por SMS, ni por el teléfono directo. Llamé a un amigo y me confirmó que están desaparecidos, que los buscaron por todo el kibutz, que en la casa no están... Que no están. Ayer buscaron por la noche, hoy por la mañana y no los encuentran”, contó itzik Horn, padre de ambos, a La Nación.
Lior Rudaeff, un encargado de seguridad
Lior Rudaeff, de 61 años, vivió casi toda su vida en Israel y el sábado cumplía con su trabajo como encargado de seguridad en el kibutz Nir Yitzhak cuando fue capturado. Su familia se recluyó en refugios por 48 horas y logró ser rescatada.