San Lorenzo y Alvear. A una cuadra de Oroño. Pleno macrocentro. Hace tres meses que un poste de telefonía está caído sobre la verdulería, sostenido por la fortuna que quiso que los cables la atajen antes de tocar el piso. Es un lugar por el que pasan personas, incluso niños, todo el tiempo. Una esquina cuyo comercio trabaja muchísimo, a veces con cola bajo la columna a medio caer. ¿De quién es la responsabilidad?
Los vecinos cuentan que desde diciembre, luego de una tormenta fuerte, quedó así y nadie fue a arreglarlo. Primero estaba caído sobre la vivienda, pero alguien la empujó hasta ese punto de aparente y efímero equilibrio que representa un peligro inminente para cualquiera que pase por debajo.
Las columnas en posiciones riesgosas ya son parte del paisaje rosarino. El de San Lorenzo y Alvear no es el único poste inclinado del centro, como una especie de Torre de Pisa de la desidia. En Tucumán casi Mitre, frente a la plaza de la Cooperación, hay otro peor desde hace muchos meses. Está sostenido por cables y sobre la línea municipal cayendo hacia la calle, con la base podrida.
Los postes son propiedad de las empresas que prestan servicio de teléfono, internet y cable, y el municipio no tiene potestad para arreglarlos ni reemplazarlos. Desde distintos barrios llegaron a La Capital casos parecidos, que a veces son apuntalados por los mismos vecinos. Desde las vecinales afirman que hacen reclamos constantes, pero no reciben respuesta.
Las fotos se multiplican por toda la ciudad. Por ejemplo, en Avellaneda y Casilda hay una situación idéntica. Lo mismo pasa en Arijón y Entre Ríos: ante la desesperación de que la columna se caiga hasta le pusieron un pequeño caño para sostenerla. En Colón y Dean Funes permanece otro poste que hace más de 5 años está igual, sostenido por las ramas de un árbol y apuntando hacia una casa. En Conway y Villa del Parque, en barrio Cristalería, apuntan otro caso.
En Guayaquil al 200, hace más de un año que un mástil está recostado sobre los cables. En Italia al 3200 hay otro enredado en un árbol. En Santa Coloma al 7900 (Hostal del Sol) denuncian la presencia de una columna a punto de caerse sostenida por cables cada vez más bajos y muy cerca de las viviendas.
En Pilcomayo al 1800 bis hay otra cuyos cables ya se cortaron varias veces. Ante el reclamo arreglan el tendido aéreo, pero no se hacen cargo de las columnas. "Se tiene que caer completamente la columna para que la cambien", contó un habitante de la zona. En la calle Danieri al 3100 la columna está atada a un árbol en el interior de un terreno para que no se caiga.
El último caso es en pasaje de la Cierva y Santiago. "El municipio dice que no puede porque es de la Empresa Provincial de la Energía, pero la EPE no aparece y así se pasan la bolilla. Igual que las podas de ramas cerca de cables de luz, por más que denunciemos en el 147 o donde sea, nadie se hace cargo", se quejó un vecino.
Reclamos
Desde Defensa Civil del municipio afirman que el procedimiento ante las denuncias es ir a constatar al lugar y pasar el reclamo a las empresas correspondientes. "Las columnas tienen propietarios como la EPE, Telecom, Cablevisión, Express o alumbrado público. Esto es una responsabilidad directa de las empresas, tienen que dar la solución reemplazando el poste", dijeron.
Según explicaron, cuando ingresan los reclamos al 103 o al 147 se verifican en el día, y si la situación es de mucho riesgo se hace un encintado, un vallado, y se genera el reclamo ante la empresa. Después se hace un circuito de verificación, pasando por el lugar mañana y tarde y generando una reiteración de la queja hasta que resuelvan el problema.
"Ellos tienen que tener equipos para dar respuesta en el día. Y no hay otra solución que cambiar las columnas que se parten. O sea, nosotros no tenemos columnas, ni gente que sepa cambiar columnas. La empresa tiene recursos que son idóneos para hacerlo. No hay chance de que Defensa Civil cambie una columna, sería algo ilógico", agregaron.