La actividad industrial durante febrero registró una suba de 3,3% interanual y de 0,6% mensual (sin estacionalidad) respecto de enero, con lo cual revirtió el comportamiento del mes anterior, cuando los datos habían estado impulsados por bajas bases de comparación, de acuerdo al reporte de la Unión Industrial Argentina (UIA).
A nivel sectorial comienza a verse cierta disparidad en el desempeño, en línea con lo observado en la primera encuesta del año del Centro de Estudios Industriales (CEU), con algunos sectores que continúan con dinamismo y otros que presentan contracciones.
Aún en un contexto complejo, algunas ramas industriales todavía continuarán con crecimiento por una mayor demanda de algunos sectores como de minería, petróleo y gas, que muestran un buen dinamismo en el último año, sumado a un mayor posicionamiento exportador de algunos sectores. En tanto, otros continuarán mostrando un año con dificultades, vinculadas al incremento de costos, a la sequía, a las restricciones a la importación.
Entre los sectores con subas interanuales se destacan el sector de refinación de petróleo, que marcó un alza de 20,8% interanual.
Por otro lado, registraron caídas interanuales de minerales no metálicos (-8,7%) y alimentos y bebidas (-7,2%), principalmente por la molienda de oleaginosas como consecuencia de la sequía, y marcó bajas la producción de Sustancias y productos químicos (-3,7%), en gran parte por problemas en el abastecimiento de algunos insumos.
Por su parte, la Comisión Económica para América latina y el Caribe (Cepal) estimó una caída de 2% en la economía Argentina, mientras que Brasil crecería 0,8%, Uruguay, Perú, Bolivia y Ecuador aumentarían un 2% cada uno y Chile decrecería en un 0,3%.
Según dio a conocer el organismo dependiente de Naciones Unidas para la región, en un “contexto de crecientes incertidumbres externas y restricciones internas, la Cepal espera que en América Latina y el Caribe se profundice la desaceleración del crecimiento económico durante 2023, que alcanzará una tasa del 1,2%”, según expresó hoy en un comunicado.
“Si bien se han desacelerado las presiones inflacionarias, cabe esperar que las tasas de política monetaria permanezcan altas a lo largo del 2023 en las principales economías desarrolladas”, señala el informe.
Canasta básica
En Argentina, más bien, la inflación se acelera. El Indec informó que el costo de los productos que integran la Canasta Básica Alimentaria (CBA) subió 9 % en marzo, lo que determinó que una familia conformada por dos adultos y dos hijos menores necesitara ingresos por $ 87.719 para no caer en la indigencia. La línea de pobreza subió 8% y se ubicó en $ 191.228 para el mismo grupo familiar.
De esta forma, la CBA, que mide la evolución de los precios de productos alimenticios necesarios para la subsistencia, acumuló una suba de 30,6% en los primeros tres meses del año. En tanto la CBT, que mide los ingresos necesarios para pagar alimentos y bebidas, indumentaria y servicios de una familia tipo, subió 25,4% entre enero y marzo.