Dos ahorristas quedaron más cerca de cobrar la deuda que el financista Luis Herrera les dejó impaga tras su default, por un monto superior al millón de dólares. Son parte de un primer grupo de damnificados que reclamó por la vía civil, donde por ahora está allanado el camino para rematar parte del patrimonio del ex titular del Rofex, quien aún no logra abrir su concurso preventivo.
Se calcula que Herrera, cuya agencia Fernández Soljan entró en crisis el año pasado, generó un impago por más de 30 millones de dólares. Si bien parte de esa cifra pertenece a operaciones informales, otro tanto quedó formalizado, a través de documentos que se convirtieron en un elemento clave para los reclamos en el fuero civil.
Según pudo conocer La Capital, a mediados de mayo el financista reconoció en sede judicial la deuda generada con dos ahorristas, a los cuales les firmó contratos de mutuo en los albores de su cesación de pagos. Lo hizo a través de sus representantes legales (pertenecientes al estudio Orquera & Asociados), quienes presentaron un escrito ante el Juzgado Civil y Comercial de la 16° Nominación. Herrera había sido citado a audiencia en esos expedientes, pero decidió no asistir.
Los abogados de los damnificados esperan ahora una resolución que ordene la preparación de la vía ejecutiva, tras lo cual presentarán "de inmediato" la acción que los habilite a rematar parte del patrimonio del financista, que se encuentra inhibido y embargado desde finales del año pasado. "No le vamos a dejar pasar ni un día", indicaron desde el estudio Peyrano & Ravena, en el que precisaron que hay un tercer caso que también avanza en el mismo sentido, por algo más de 700.000 dólares.
Por ahora, el remate de los bienes de Herrera sigue siendo posible porque aún no logró que la Justicia convalide la apertura de su concurso preventivo, una instancia que le permitiría proteger su patrimonio. El ex presidente del Rofex lo había intentado en diciembre, pero fue rechazado por un fallo de primera instancia. La medida fue apelada y recayó en la sala I de la Cámara, que a la fecha no se pronunció.
El mencionado bufete jurídico está terminando de preparar una demanda colectiva en el fuero penal, ámbito en el que se siguen acumulando denuncias. La suerte allí parece más difusa, ya que buena parte de los damnificados responde a aquellos ahorristas cuyas operaciones se movían en el circuito informal.
La Fiscalía sigue aguardando la respuesta del mercado de futuros de Chicago, donde Herrera decía invertir gran parte de lo recaudado. Esa prueba será clave para comprobar o descartar la principal hipótesis que tienen en la Unidad de Delitos Económicos.
Tal como relató oportunamente La Capital, al tratarse de operaciones en las sombras, no resulta tarea sencilla poder demostrar la supuesta estafa. En las entrevistas, los damnificados exhiben los documentos -"desprovistos de toda legalidad", cuentan en Fiscalía- con los que Herrera acreditaba la recepción de los fondos a una supuesta cuenta comitente.