Rafael Ianover (Ex Vice de Papel Prensa), Lidia Papaleo (Viuda de David Graiver), José Pirilo (Ex dueño de La Razón), Peralta Ramos (Dueño de La Razón cuando compran Papel Prensa), Bartolomé Mitre (Dueño de La Nación) y Héctor Magnetto (CEO del Grupo Clarín) fueron actores importantes en la historia Papel Prensa.
En el informe “Papel Prensa LA VERDAD”, Lidia Papaleo expresó: "el siguiente relato, comienza con la muerte de mi marido David Graiver, momento en el que vivíamos junto con mi hija menor de edad María Sol, en México. A partir de allí comencé a sufrir terribles presiones vinculadas en nuestros bienes, entre los que se encontraba Papel Prensa S.A."
Texto de Lidia Papaleo en "Papel Prensa LA VERDAD"
“Papel Prensa LA VERDAD” presenta un informe de Rafael Ianover: "el compromiso de venta se firmó el 2 de noviembre de 1976 y tanto mi señora como yo firmamos el mismo contrato con la presencia de Patricio Peralta Ramos, dueño de La Razón, quién nos aseguró, dándonos su palabra de que no nos ocurriría absolutamente nada si firmábamos. Debo agregar que no hubo tratativas de ninguna naturaleza y el precio no surgió en competencia con otras ofertas, puesto que en lo que a mí respecta, nunca tuve oportunidad de estudiar las ofertas de otros eventuales compradores, ni de discutir el precio supuestamente acordado".
Texto de Rafael Ianover en "Papel Prensa LA VERDAD"
José Pirillo, también da su verdad en el informe de la Secretaría de Comercio Interior: "recuerdo que Peralta Ramo me dijo que en la compra de Papel Prensa intervino la Junta Militar, quién se la ofreció como negocio, esto vino en relación a que los diarios Clarín, La Nación y La Razón habían solicitado hacer una nueva planta de papel. La Junta le pidió tiempo y luego les ofreció que se hicieran cargo de Papel Prensa, que no tomen contacto con los Graiver hasta que ellos les avisen. O sea, es la Junta Militar la que ofrecía el negocio".
Texto de Jose Pirillo en "Papel Prensa LA VERDAD"
Según “Silencio por sangre. La verdadera historia de Papel Prensa”, logra describir a una serie de conspiradores, civiles y militares, que se apropiaron de bienes de un valor descomunal por un dinero irrisorio y, para ello, no repararon en el secuestro, la tortura y el asesinato.
El 10 de noviembre de 1976, después de haber arrancado las acciones a Lidia Papaleo de Graiver, los directivos de La Razón, La Nación y Clarín dieron una "conferencia de prensa" en la sede de la Asociación de Entidades periodísticas Argentinas (ADEPA), esa nefasta asociación de lobby que sobrevive para vergüenza de la libertad de expresión. Allí, con bombos y platillos, dejaron por escrito "la adquisición se había efectuado con el fin de rescatar a Papel Prensa SA para la prensa argentina, evitando que su control estuviera en manos de personas extrañas al periodismo nacional". Agregaron que "todos los usuarios que lo desearen podían tener participación en la Sociedad, de acuerdo con las previsiones legales y estatutarias". Escribieron "usuarios" en vez de editores o dueños de diarios para anticipar la burla que toda vía hoy persiste.
Héctor Magnetto, número dos de Clarín, y Bartolomé Mitre, director y accionista de La Nación, habían estado con Lidia Papaleo todas las veces que fue necesario para que ella firmara una venta de una empresa millonaria a cambio de un adelanto de siete mil dólares.
Informe final sobre Papel Prensa LA VERDAD