La noche del Coloso Marcelo Bielsa terminó con un resultado adverso para Newell’s. Por lo que había mostrado en el primer tiempo, podía imaginarse otro trámite parejo en el complemento. No sólo los errores de Arboleda descompensaron el andar del conjunto dirigido por Sanguinetti, también tuvo que lidiar con dos lesionados: Jerónimo Cacciabue y Leonel Vangioni.
A los 6 minutos del complemento, Cacciabue reemplazó a Pablo Pérez, que le puso garra al inicio pero sintió el desgaste y fue reemplazado. El Aviador apenas estuvo 9 minutos en cancha, no alcanzó a acomodarse, que tuvo que retirarse dolorido. El volante había ingresado para darle más contención al mediocampo, que para esa altura se la veía complicada ante los atrevidos mediocampistas del millonario. Fue reemplazado por Juan Sforza, a los 15 minutos de la segunda parte. Al juvenil de Newell's le costó acomodarse y quedó pagando más de una vez.
La otra mala llegó por el lado de Vangioni. El Piri había redondeado un gran primer tiempo con quite, seguridad en la marca y varias proyecciones que inquietaron la banda derecha de la defensa del conjunto de Gallardo.
Pero una mala jugada lo dejó al lateral izquierdo bastante tocado y no pudo recuperarse en ningún momento. Por eso, Sanguinetti, que ya había agotado los cambios, lo dejó en la cancha y el Piri terminó jugando como delantero. Claro que prácticamente sin movilidad.
A esa altura Newell’s ya no tenía vuelta atrás y el resultado estaba prácticamente sentenciado. Pero el tema de las lesiones, sumadas a los fallos de Arboleda, terminaron siendo otro aliciente para dejar a la lepra sin nada.
Una noche que había comenzado bien pero que terminó de la peor manera para las aspiraciones del equipo leproso.
Habrá que ver que resultado arrojan los estudios posteriores tanto para Cacciabue como para Vangioni. El volante se retiró bastante dolorido, mientras que el defensor al menos pudo continuar en la cancha, por lo que el pronóstico pinta, a priori, como más alentador.
Lo cierto es que todo contribuyó para que Newell’s se quedará sin nada. Aunque claro, lo de Arboleda fue más determinante.
reasco.jpg
Ofreció poco. Reasco se perdió rápido en la intrascendencia colectiva leprosa.
Reasco: estreno con pocas luces
Se esperaba algo más. Sobre todo por el pergamino que acumula. Djorkaeff Reasco tuvo su estreno oficial con la casaca leprosa nada menos que en el Coloso Marcelo Bielsa y ante River. Era el combo ideal para hacer su presentación a todas luces. Nada de eso sucedió. El ecuatoriano ingresó a los 60 y terminó perdiéndose en la intrascendencia colectiva.
Había una marcada expectativas en la previa por la inclusión o no desde el vamos de Reasco entre los once. Javier Sanguinetti optó por lo más racional y lo dejó entre los relevos. Era una buena estrategia, ya que todo presagiaba que podría ingresar en el complemento y desequilibrar sin piedad en campo millonario.
Si bien entró por Juan Garro cuando el partido estaba igualado, lo concreto es que no logró insertarse dentro del circuito futbolístico. Se lo vio intentando suplir un puesto fijo con más actitud que un plan de vuelo táctico. Y lo pagó pasando inadvertido o siendo absorbido por los riverplatenses.
Si bien fue el primer encuentro y el resultado fue adverso para la lepra, también es verdad que Reasco tiene potencial para brindar una imagen más suculenta y prometedora en un futuro cercano, teniendo en cuenta que llegó como una solución en la faz ofensiva.