Llega fin de año y para muchos la fecha opera como punto de inicio de las vacaciones de verano, el momento más esperado. O al menos para empezar a planear el tan ansiado descanso en alguno de los lugares turísticos del país. Y uno de los puntos principales a tener en cuenta, si se posee automóvil y se decide salir a la ruta, es tener en regla la revisión técnica obligatoria (RTO), trámite por el que se deberá pagar esta temporada $6 mil, una tarifa que fija el gobierno de la provincia y que rige por igual en todo el territorio de Santa Fe.
Carlos López, director ejecutivo de la Cámara de Centros de Inspección Vehicular (CCIV), señaló a La Capital que en esta época del año “empieza la mayor afluencia a los talleres porque la gente tiene la costumbre de hacer la RTO para viajar. Pero hay que remarcar que la revisación tiene que estar hecha para todo el año, no solo cuando se sale de vacaciones”. Las estadísticas oficiales indican que en noviembre se realizaron 45 mil inspecciones en toda la provincia, pero aún sigue siendo bajo el porcentaje de vehículos que pasan por los 28 talleres ubicados a largo y ancho del territorio: solo el 33% cumple con la RTO.
“Muchas veces, el usuario no presta atención al vencimiento de la RTO y espera hasta el verano porque tiene que viajar. Algunos la tienen vencida desde agosto o septiembre y van recién en diciembre o enero a hacer la revisión. Por eso se concentra más gente en esta época. Está esa creencia que el control se hace en la ruta o fuera de la ciudad. Y no es así. Te pueden pedir la RTO en la ciudad o cuando se viaja dentro de la provincia”, manifestó López.
Documentación básica para la RTO
Siempre es bueno tener en cuenta, o reiterar, las cuestiones básicas que deben tener en cuenta quienes acuden a hacer la RTO. En los distintos centros de inspección se debe presentar toda la documentación obligatoria para circular:
* Licencia de conducir
* DNI
* Patente
* Seguro al día
* Tarjeta verde.
* Si cuenta con sistema de GNC, la documentación correspondiente
* Presentar matafuego, balizas y botín de primeros auxilios.
López añadió que la Cámara de Centros de Inspección agrupa a 28 talleres que están distribuidos en toda la provincia, sumados a un camión con todo el equipo adecuado que se mueve básicamente en la zona norte “donde no se justifica la instalación de una planta de revisión técnica. En Rosario, hay dos talleres (uno en la zona de Circunvalación y Uriburu y otro en Francia al 5800). También hay centros en Roldán, Villa Gobernador Gálvez, Villa Constitución y San Lorenzo.
El representante de esos establecimientos señaló que en noviembre se realizaron 45 mil inspecciones en toda la provincia. “Nuestro sistema en Santa Fe está considerado por el Consejo Federal de Seguridad Vial como el mejor del país. Aun así, solo el 33% de los vehículos hacen la verificación técnica. Es un porcentaje muy importante de rodados que no cumple con este requisito. Algo parecido se da con los seguros. Cuando se agrava la situación económica, se registra un alto porcentaje de vehículos circulando sin seguro. Esto está relacionado con los controles. Si hubiera más controles habría más exámenes técnicos”, afirmó López.
Más controles, más revisiones
“Un centro de revisión técnica identifica que cuando hay controles más cercanos aumenta la afluencia. No comparto la idea de hacer controles tipo operativo comando. Deberían instrumentarse de manera más metódica o automática, no tan concentrados en determinados lugares, tan explosivos que después desaparecen. Pero eso depende de las autoridades, no participamos de eso”, subrayó.
Al ser consultado sobre cuál fue la variación de la tarifa de este año con relación al año pasado, el referente de los talleristas consideró: “Nosotros lo comparamos con el precio de la nafta. Si uno quiere llenar el tanque, con 6 mil pesos apenas llega a la mitad. Y también hay que tener en cuenta frecuencia con que se hace la revisión. Un vehículo 0 km realiza el primer test a los tres años; el segundo lo hace a los dos años y el tercero otra vez a los dos años. Después de los siete años, se hace una vez por año. Se hace una vez por año porque se considera que por el desgaste de los materiales en ese tiempo es el más aconsejable. Si uno lo mide en relación al gasto del auto en un año, la RTO no tiene una gran incidencia. Es más polémica que otra cosa. Seis mil pesos no es ni medio tanque una vez por año en el peor de los casos”.
López hizo también una consideración a la importancia de tener un vehículo en condiciones no sólo cuando se sale de vacaciones, sino siempre. “Viajar o tener el auto en condiciones es responsabilidad de cada uno, por la familia y por terceros. Hemos constatado que un vehículo perdió una rueda, se mató una persona y al chequear el dominio vimos que nunca había pasado por una inspección técnica. Eso ya depende de los controles y de cada uno”, añadió López.
En las RTO, dijo López, se hacen constataciones sobre más de 300 puntos en cada vehículo. Ocho de esos ítems se revisan por “laboratorio”, el resto se realizan en forma visual (limpiaparabrisas, cinturones de seguridad, por ejemplo).
“Una vez pasados todos los controles hay un registro de cuestiones relaciones con tren delantero, frenos, luces que son las fallas más repetidas”, agregó. "A partir de la pandemia, la provincia obligó a otorgar turnos. Eso ha ordenado un poco más la atención y evita la aglomeración de gente. Más allá de que aumenten las revisiones en el verano, el turno facilita que el contribuyente no tenga que esperar. Los turnos se pueden sacar ingresando en el sitio web www.cciv.com.ar".