Funcionarios del Ministerio de Seguridad de la nación remarcaron ayer en el Congreso que el refuerzo de fuerzas federales en Santa Fe será "cualitativo y no cuantitativo", y destacaron que en la provincia hay 3 mil gendarmes, 800 de ellos en Rosario.
Las declaraciones fueron expuestas por el secretario de Seguridad, Eugenio Burzaco, y su par de Seguridad Interior, Gerardo Milman, en el Senado; donde concurrieron a explicar los alcances del convenio "Argentina sin narcotráfico" que anunció hace nueve días el presidente Mauricio Macri en el predio de Tecnópolis.
Los funcionarios participaron de la sesión de comisión presidida por Sigrid Kunath, titular de Seguridad Interior, que contó con la presencia de una decena de senadores, entre ellos los santafesinos Omar Perotti y María de los Angeles Sacnun.
Cualquier debate sobre narcotráfico en la Argentina conduce a la provincia de Santa Fe. "Que hoy tiene dos de las tres ciudades con más crímenes de la Argentina", destacó Burzaco. La triada de ciudades con más crímenes, además de Santa Fe y Rosario, incluye a Comodoro Rivadavia, provincia de Chubut.
En ese ámbito, Burzaco confirmó que se encuentra trabajando en "un convenio con la provincia de Santa Fe donde, si bien habrá refuerzos en situaciones puntuales (en las dotaciones de agentes de fuerzas federales), lo más significativo será lo cualitativo".
Ante un pedido expreso de la senadora Sacnun (FpV) por la presencia urgente de Gendarmería en Santa Fe, y sobre el número de efectivos involucrados, y a involucrar,Burzaco sorprendió: "Hoy hay unos tres mil gendarmes en la provincia, unos 800 en Rosario".
Según explicitó Sacnun, los números que maneja la provincia son otros. "(Miguel) Lifschtiz nos dijo a los legisladores nacionales, el lunes pasado, que en provincia de Santa Fe hoy hay solamente unos 400 gendarmes", remarcó.
La discrepancia numérica también involucra al pasado. "Tampoco había cuatro mil gendarmes en 2015 en Santa Fe", dijo Burzaco, en relación a la cifra que habría expresado el gobernador en la reunión que mantuvo con 16 de los 22 legisladores nacionales por Santa Fe, que tienen despacho en el Congreso nacional.
Tensión. Más allá de los números, La Capital pudo saber que la tensión principal en la letra fina del convenio que se rubricaría en las próximas horas, y que será presentado por los funcionarios nacionales en el territorio santafesino, pasa por la conducción política y operativa de los llamados "comandos conjuntos".
La oferta del gobierno nacional implica subordinar, en la práctica, la policía provincial al mando de los federales. La preocupación en la Casa Rosada no sería la inevitable colisión jurisdiccional que implicará subordinar fuerzas provinciales a las agencias nacionales, sino "evitar que no sea visto como un desmérito para las autoridades de la provincia".
Voces cercanas al despacho de Bullrich explicaron que, si la Nación no consigue tener a los agentes provinciales bajo la suela de sus zapatos, "te terminan jugando en contra, para el lado de los narcos".
En ese sentido, la senadora Sacnun puso sus reparos. "Con una desocupación creciente, conflicto social en ascenso, pobreza y desesperación de los sectores desfavorecidos, sería cuidadosa en dejar en manos de las agencias federales la intervención sobre todo tipo de delito, y no sólo de los delitos federales que prevé la Constitución", señaló.
Por su parte, el senador Perotti pidió expresamente a los funcionarios nacionales que tomen en cuenta la emergencia que vive la provincia. "No podemos seguir esperando, porque a los santafesinos nos están matando", casi rogó. El rafaelino pidió que la presencia de Gendarmería no sea transitoria. "Nos parece bien que el gobierno nacional haya declarado la emergencia en seguridad, les pedimos que apliquen medidas concretas de esa emergencia; nuestra provincia las necesita más que ninguna", abundó.
Críticas. En el salón Illia del Senado, ayer, y durante más de dos horas, también hubo preguntas y durísimas críticas a la política nacional de seguridad. Como el caso del puntano Adolfo Rodríguez Saá, que compartió el estrado con los funcionarios nacionales. "¿Hasta cuándo van a seguir con los anuncios, con puras palabras?", le disparó a Burzaco, sentado casi a su lado. Hacía referencia al convenio firmado en Tecnópolis por Macri, la casi totalidad de los gobernadores y decenas de intendentes de todo el país EM_DASHincluida la rosarina Mónica FeinEM_DASH, todo bajo la atenta mirada del presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti.
"El decreto 717 de 1991, que está vigente, dice lo mismo, pero más detallado y mejor elaborado, que el que convenio que hizo firmar el gobierno en Teconópolis. El problema es que no se hizo nada. No era necesario un nuevo convenio. Hay que llevar a cabo los instrumentos que ya están vigentes", se explayó.
El puntano remató con un inquietante desafío: "No se trata de nada personal contra la provincia de Santa Fe, ¿pero no era que la Gendarmería está para cuidar las fronteras, y la Prefectura los mares y los ríos?".