Rosario- Los bomberos zapadores cumplen una función vital para la sociedad. Y la gente a veces también recurre a pedidos insólitos. Como anoche, cuando tuvieron que dirigirse hasta un departamento céntrico para rescatar a un murciélago.
Rosario- Los bomberos zapadores cumplen una función vital para la sociedad. Y la gente a veces también recurre a pedidos insólitos. Como anoche, cuando tuvieron que dirigirse hasta un departamento céntrico para rescatar a un murciélago.
Según contó a La Capital on line el jefe interino del cuerpo, Gerardo Frea, “para el común de la gente eso puede ser insólito. Pero para nosotros es algo normal. No tanto con los murciélagos, pero en este caso el animal había quedado encerrado entre la tela metálica y la persiana” de un departamento ubicado en el 7º piso de un edificio de calle Mitre al 200, adonde concurrieron ante el llamado de la propietaria, una mujer viuda de 57 años.
“No sólo apagamos incendios. También hacemos cosas que para el común de la gente pueden
resultar insólitas, como ayudar a un plomero al que se le atascó el dedo en una cañería, algo que
nos pasó hace unos meses. Después, rescatar gatos, perros y loros que no pueden bajar de los
árboles o que quedan atrapados en algún lugar es algo común”, detalló Frea.
Por Lucas Aranda