Todos tienen responsabilidad, pero pagan los propietarios de los autos que tenían los vehículos mal estacionados en las veredas. Un motociclista por no llevar el casco y los dueños de los rodados por usar las aceras como cocheras. Así lo resolvió el Tribunal Colegiado de Responsabilidad Extracontractual de la Segunda Nominación de Rosario en una causa que fue una colección de imprudencias y expone la creciente sucesión de casos en los que los magistrados responsabilizan a todas las partes.
El conductor de una moto denunció que el 18 de abril de 2002, cerca de las 19.15, circulaba en el rodado de gran cilindrada por calle Catamarca hacia el oeste, y al traspasar Rodríguez tenía pensado tomar Callao al norte.
Pero a metros de llegar a la esquina salió de la línea de estacionamiento un Renault 12 portando en la parte trasera una bicicleta y con luces apagadas, por lo que realizó una maniobra a los efectos de esquivar el vehículo, pero se enganchó el traje en el rodado que sobresalía del baúl, perdió el equilibrio, cruzó hacia el otro cordón y pegó su cuerpo contra un Ford Ka que también estaba estacionado sobre la vereda.
El motociclista denunció que producto del accidente tuvo un traumatismo de cráneo grave, con un golpe fuerte detrás de la oreja derecha, corte en el cuero cabelludo con tres puntos de sutura, corte en pierna derecha con cinco puntos de sutura, fractura de tres dientes delanteros superiores y lastimaduras varias por todo el cuerpo. “No perdí el conocimiento, pero tuve una amnesia temporal de una hora y media”, relató.
La parte demandada imputó culpa de la víctima, indicando que se conducía con temeridad e imprudencia, sin portar casco protector.
Frente a esta situación, el tribunal concluyó que la falta de utilización del casco “tuvo efectivamente incidencia causal, debiendo tenerse presente la ordenanza municipal 6.543/1998, que expresamente puntualiza «que tratándose de una motocicleta, sus ocupantes lleven puestos cascos»”.
Los jueces, además de señalar el carácter antirreglamentario de estacionar sobre la vereda, también resaltaron que está prohibido “transportar cualquier carga o elemento que perturbe la visibilidad, afecte peligrosamente las condiciones aerodinámicas del vehículo, oculte luces o indicadores o sobresalga de los límites permitidos”.
Así, dos autos mal estacionados en ambas veredas, uno de ellos con una bicicleta que sobresalía del baúl y un motociclista que, según la pericia, si hubiera tenido el casco puesto no se hubiese lesionado la cabeza de la manera que le sucedió, son todos responsables para los jueces Juan José Bentolila, Gustavo Antelo y Viviana Cingolani, del tribunal de Responsabilidad Extracontractual.
De todos modos, los magistrados establecieron matices que se plasmaron en los diferentes porcentajes que las partes deben afrontar de los costos del juicio.
Si bien los montos en este caso en particular no son elevados, exponen, una vez más, el uso abusivo del espacio destinado a los peatones por parte de los automovilistas, y las consecuencias que trae en el tránsito y en los transeúntes el estacionamiento de autos sobre las veredas.