La nave espacial Maven, de la Nasa, que actualmente orbita Marte, descubrió que el Sol probablemente despojó al planeta rojo de lo que alguna vez fue una gruesa atmósfera, y de su agua.
La nave espacial Maven, de la Nasa, que actualmente orbita Marte, descubrió que el Sol probablemente despojó al planeta rojo de lo que alguna vez fue una gruesa atmósfera, y de su agua.
Enormes tormentas solares eran comunes en los primeros años del Sistema Solar. Así que hace miles de millones de años, esas tormentas habrían sido suficiente para acabar con la atmósfera de Marte, transformando al planeta de un sitio húmedo y tibio potencialmente capaz de generar vida microscópica en el desierto frío y seco que es ahora.
Ayer, los científicos reportaron que incluso actualmente, el viento solar arrastra cerca de 100 gramos de gas atmosférico por segundo.
"No puedo evitar imaginar hamburguesas escapando de la atmósfera marciana, una por segundo", dijo sonriendo en rueda de prensa el científico Dave Brain, del proyecto Maven. "En lugar de ello es oxígeno y dióxido de carbono lo que está escapando del planeta, los cuales son importantes tanto para el agua como para el clima del planeta en su conjunto".
Estos descubrimientos recientes de exploradores robóticos como Maven son una parte crucial del esfuerzo de la Nasa para enviar exploradores humanos al planeta rojo en la década de 2030. Hace apenas poco más de un mes, el explorador Mars Reconnaissance Orbiter reveló evidencia de agua salada goteando de laderas marcianas, al menos en el verano.
La siguiente misión de la Nasa se inicia en marzo venidero con el lanzamiento de otro explorador orbital.
Bruce Jakosky, científico principal del proyecto, y su equipo reportaron que durante expulsiones masivas solares de gas en marzo, el explorador espacial advirtió que iones de oxígeno eran arrojados más alto de lo esperado en la atmósfera. Al mismo tiempo, flujos de actividad magnética de rápido movimiento alcanzaron una altura de casi 5.000 kilómetros en el espacio.
Eso llevó a los científicos a llegar a la conclusión de que la disminución de la atmósfera de Marte pudo haber sido ocasionada en gran medida por eventos solares grandes ocurridos en la etapa inicial del planeta.
"Al igual que el robo de unas monedas de una caja registradora cada día, la pérdida llega a ser significativa en el tiempo", dijo Bruce Jakosky, investigador principal de Maven y la Universidad de Colorado en Boulder. "Hemos visto que la erosión atmosférica aumenta significativamente durante las tormentas solares, por lo que se piensa que la tasa de pérdida fue mucho más alta miles de millones de años atrás, cuando el Sol era joven y más activo".
El viento solar es una corriente de partículas, principalmente protones y electrones, que fluye de la atmósfera del Sol a una velocidad de aproximadamente 1,5 millón de kilómetros por hora. El campo magnético llevado por el viento solar a medida que fluye, puede generar un campo eléctrico que acelera los átomos de gas eléctricamente cargados (iones) en la atmósfera superior de Marte y los dispara en el espacio. Esa atmósfera probablemente habría desaparecido en un período de algunos cientos de millones de años. Marte ya no tiene un campo magnético global, pero cuando lo tuvo hace 4.000 millones de años, eso hubiera evitado su pérdida de atmósfera a gran escala, señalaron los investigadores.
El fuerte campo magnético de la Tierra encierra nuestra propia atmósfera, evitando erosión directa por el viento solar.
Los hallazgos fueron publicados en la revista Science de esta semana. La edición incluye cuatro estudios realizados por la aeronave, que ha orbitado Marte para estudiar su atmósfera durante un año.
"Marte parece haber tenido una atmósfera gruesa y lo suficientemente cálida como para soportar agua líquida, que es un ingrediente clave y un medio para la vida tal como la conocemos actualmente", dijo ayer en Washington el astronauta y administrador asociado para la Dirección de Misiones Científicas de la Nasa, John Grunsfeld.
"Regiones antiguas en Marte muestran signos de abundante agua, como valles excavados por los ríos y depósitos minerales que sólo se forman en presencia de agua líquida. Estas características han llevado a los científicos a pensar que hace miles de millones de años, la atmósfera de Marte fue mucho más densa y lo suficientemente cálida para formar ríos, lagos y quizá incluso océanos de agua líquida", dijo Bruce Jakosky.