El Papa Francisco lanzó este jueves en el Vaticano un movimiento internacional de estudiantes comprometidos con la defensa del medio ambiente y del diálogo ante un grupo de jóvenes y artistas, entre ellos el líder de U2, Bono, quien tuvo un inesperado traductor: el senador argentino Martín Lousteau.
El cantante de la banda irlandesa, patrocinador a nivel mundial de Scholas Occurrentes, participó de un encuentro en el Aula Magna de la Pontificia Universidad Urbaniana junto a figuras del deporte y de la tecnología. También estuvieron presentes el senador radical, el gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, y el intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray.
Cuando tomó la palabra Bono, en inglés, Lousteau ofició de traductor al castellano. El líder de U2 elogió al Sumo Pontífice por crear el programa Scholas Occurrentes: "La educación de las niñas es un superpoder en la lucha contra la pobreza extrema", dijo, y añadió: “Aquí se habla de cultura del encuentro, de la inclusión”.
“Defender la naturaleza es defender la poesía de la creación, es luchar por la armonía”, aseguró el Papa, quien asistió al acto en una silla de ruedas debido a dolores en la rodilla que le impiden caminar o estar mucho tiempo de pie.
El papa Francisco participó de un acto junto a Bono y Martín Lousteau ofició de traductor
El movimiento se basa en la experiencia adquirida por la fundación pontificia Scholas Occurrentes, una red mundial de jóvenes unidos a través de la educación y el deporte.
La red, creada por el Papa argentino en agosto del 2013, pocos meses después de su elección como pontífice, está presente en 190 países y cuenta con cerca medio millón de escuelas de todas las religiones, tanto públicas como privadas.
La idea de promover la paz y la inclusión social a través de la educación y el deporte ha sido un tema que el Papa trabaja desde antes de su elección al trono de Pedro en 2013, cuando era arzobispo de Buenos Aires.
Francisco lanzó también la Escuela Laudato Si', del nombre de la encíclica papal sobre el cuidado de la Casa Común, a la que asisten en el Vaticano 50 estudiantes de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, España, Haití, Italia, México, Panamá, Paraguay y Portugal.