El premio Nobel Mario Vargas Llosa hizo una encendida defensa del idioma en la apertura del VI Congreso de la Lengua
El premio Nobel Mario Vargas Llosa hizo una encendida defensa del idioma en la apertura del VI Congreso de la Lengua
El español es actualmente "una de las lenguas más dinámicas, más extendidas y modernas del mundo" y debe ser defendido y cuidado, consideró ayer el premio Nobel Mario Vargas Llosa durante la inauguración del VI Congreso Internacional de la Lengua Española en la ciudad de Panamá.
Organizado por el Instituto Cervantes y la Real Academia Española (RAE) junto con la Asociación de Academias de la Lengua Española, el VI Congreso Internacional se celebra hasta pasado mañana con la asistencia de más de 200 académicos, escritores, directores de bibliotecas nacionales, editores y otros profesionales vinculados a la lengua de Cervantes.
"Es un idioma que no se ha quedado confinado en las 22 sociedades del que es lengua oficial", destacó el escritor peruano, que le dio brillo a la ceremonia de apertura de la cita junto al nicaragüense Sergio Ramírez y el príncipe de España Felipe.
"Sigue creciendo, rebalsando esas fronteras, ocupando por una fuerza natural cabeceras de playa en muchos otros países, lo que demuestra su dinamismo, su utilidad, y su fecundidad", aseveró Vargas Llosa, de 77 años.
"Tener el privilegio de una lengua de estas características implica también una obligación", indicó el autor de "Pantaleón y las visitadoras" y "Conversación en La Catedral".
"Necesitamos defender y cuidar nuestra lengua. No cerrándola desde luego a las influencias extranjeras, sino abriendo las puertas y ventanas del español para que las influencias extranjeras vengan a enriquecerla, así como el español en esos intercambios lingüísticos enriquece a otras lenguas hermanas", dijo.
Una necesaria cohesión. Vargas Llosa (Arequipa, 1936) propuso mantener la cohesión del idioma de Cervantes, "al mismo tiempo que dinamizando su modernidad y actualidad, respetando esa riquísima, esa maravillosa tradición que la ha constituido, la de esos grandes escritores que tienden puentes entre todos los hispanohablantes del mundo".
"Entre esas maneras de querer y respetar y enriquecer nuestra lengua, impidiéndole que se empobrezca y se degrade, están certámenes como el que inauguramos hoy día", sostuvo Vargas Llosa.
El escritor, que llega a Panamá con su nueva novela "El héroe discreto" bajo el brazo, recordó que el español de los conquistadores "dio a los hispanoamericanos, a los que serían llamados después latinoamericanos, un denominador común, una lengua que efectivamente los unió por encima de sus diferentes tradiciones, sus diferentes costumbres, sus diferentes dioses y creencias".
"Una lengua que poco a poco, como Garcilaso, como sor Juana Inés de la Cruz, los indianos, los españoles de América, irían también enriqueciendo y diversificando con obras de gran originalidad artística", aseveró el escritor durante la ceremonia en el Centro de Convenciones Atlapa.
Ramírez, por su parte, abrió su intervención centrándose en escritores que dejan de escribir en la lengua con que nacieron, como el checo Milan Kundera. "No puedo verlo sino como una dolorosa mutilación, como la castración que se practicaba a los «castrati» en el siglo XVII, que ganaban una nueva voz, pero perdían para siempre la propia".
La sexta edición del Congreso se celebra desde este domingo a orillas del Pacífico, bajo el lema "El español en el libro: del Atlántico al Mar del Sur".
En su inauguración estuvieron también José Manuel Blecua, director de la Real Academia Española, institución que durante el congreso recibirá un homenaje por su tercer centenario, y Víctor García de la Concha, cabeza del Instituto Cervantes.