La radiación ha alcanzado un nivel récord en un pozo situado en la usina nuclear japonesa de Fukushima, cerca de una cisterna que sufrió un escape de 300 toneladas de agua tóxica en agosto, se anunció ayer.
La radiación ha alcanzado un nivel récord en un pozo situado en la usina nuclear japonesa de Fukushima, cerca de una cisterna que sufrió un escape de 300 toneladas de agua tóxica en agosto, se anunció ayer.
La compañía eléctrica Tokyo Electric Power señaló que la radiación detectada en las muestras de agua de ese pozo era de 400.000 becquereles de sustancias emisoras de rayos beta por litro. Es el nivel más alto desde el accidente nuclear ocurrido en 2011, como consecuencia de un tsunami. En las muestras extraídas en días anteriores, el nivel era de apenas 60 a 90 becquereles por litro.
El escape de la cisterna fue descubierto en agosto. Desde entonces se retiró agua de esa cisterna, y la tierra de alrededor. Pero las fuertes lluvias de los últimos días podrían haber contribuido a arrastrar materiales contaminados al pozo.
Tras el tsunami de marzo de 2011, Tepco vertió miles de toneladas de agua en los reactores para enfriarlos. El agua radiactiva está almacenada en unas 1.000 cisternas.