Pese a las maniobras del Ministerio de Economía y el Banco Central, la city no encuentra el equilibrio. Los bonos bajaron y el dólar subió durante una rueda en la que el gobierno intervino para trata de bajar la tasa en la curva de deuda en pesos y en la que la autoridad monetaria realizó un nuevo parche a la nueva política de encajes bancarios.
El dólar oficial subió por segunda jornada consecutiva en el segmento mayorista a pesar de las supertasas de las cauciones bursátiles a un día, que en el pasado miércoles se dispararon hasta un pico del 150 % para luego cerrar en un 70 %. El jueves se ubicaron en un 49,85 %.
El tipo de cambio mayorista trepó $14 a $1.315 y acumula una suba de $22,5 en las últimas dos ruedas. El minorista subió $1.325,53 para la venta. El presidente de Dracma Investments, Santiago López Alfaro, señaló que el tipo de cambio todavía “no terminó de ajustarse” tras los cambios que llevó adelante el BCRA con respecto al manejo de liquidez de los bancos y las altas tasas.
La volatilidad de las tasas cortas actúa como una condicionante. El Chief Investments Officer de Wise Capital, Ignacio Morales, señaló que a diferencia de lo ocurrido lunes y martes, cuando la falta de demanda bancaria desplomó las tasas hacia el final de la rueda, el miércoles predominó la especulación.
Riesgo país
Los bonos en dólares cayeron por segunda jornada consecutiva, destacándose las pérdidas en los títulos más largos y emitidos bajo ley extranjera. En la jornada previa ya habían sufrido retrocesos, que llevaron el riesgo país cerca de los 750 puntos básicos.
En cuanto a los instrumentos en pesos, la nota la dieron las Lecap y los Boncap, que hacia el final de la rueda exhibieron fuertes subas en sus cotizaciones. PPI sostuvo que “todo parecería indicar que el Banco Central habría intervenido para apoyar a los bonos de tasa fija en pesos, generando una fuerte presión sobre todo el tramo largo de la curva”. Las dos Lecap con vencimiento a noviembre treparon 1,1 %, dejando sus tasas en 3,8 %.
El gobierno, en coordinación con el BCRA, vienen tratando de reducir la volatilidad que mostraron las tasas en las últimas semanas, a partir del inicio de un nuevo esquema monetario, que en su génesis buscaba fijar la cantidad de pesos y dejar el precio librado a la oferta y demanda del mercado. Por otra parte, también fue relevante la reducción en los bonos en pesos ajustados por inflación (CER).
Los parches
En medio del desbarajuste, el Banco Central definió una nueva modificación en el cálculo del efectivo mínimo que deben mantener los bancos. La medida busca flexibilizar la operatoria diaria de las entidades monetarias luego de que la autoridad monetaria había pasado a medir estos encajes de forma diaria en lugar de por promedio mensual.
Esto significa que desde septiembre, cuando un banco tome dinero prestado a través de pases pasivos o cauciones bursátiles, esa deuda podrá restarse del cálculo del encaje pero solo si el resultado neto es negativo. Es decir, si tomó más fondos de los que colocó.
El presidente Javier Milei enfrenta un escenario de máxima tensión política y económica. Un informe de Barclays advirtió sobre riesgos crecientes en la economía argentina y señaló que la percepción de un régimen cambiario transitorio podría desatar tensiones en el mercado y hacer que el gobierno se vea en la obligación de vender dólares en el techo de la banda cambiaria. Las costuras del modelo político y económico se tensan.