Hace aproximadamente cinco años, a mi madre, que tiene una pensión ferroviaria, le vienen
descontando una suma por un servicio que no contrató. Primero no nos dimos cuenta, porque sólo
había una sigla y el descuento; pero después apareció figurando una tal "Afilic. Ferromar pesos 2".
Me dirigí a la Unión Ferroviaria para que me dieran una explicación y me dijeron que vaya a la
Ansés, porque tenían información de que a muchos jubilados le estaban descontando. En Ansés me
dijeron que Ferromar tenía su domicilio en Mendoza y que estaba ligada al Sindicato de Luz y
Fuerza. Envié una carta certificada con aviso de retorno, para que cese dicho descuento, pero nunca
me respondieron. Un familiar se dirigió a Mendoza a esta mutual y le dijeron que ya habían tenido
reclamos y que iban a dejar de descontar. Como no tuve novedades, me dirigí al Sindicato de Luz y
Fuerza de Rosario, donde allí me dieron más datos: esa mutual no pertenecía a su sindicato, sino
que ellos tuvieron que hacer una presentación porque también le estaban descontando a sus
jubilados. Con todas estas idas y vueltas llevé todos los comprobantes a un abogado, quien hizo una
presentación en Ansés, donde hay innumerables reclamos. Pero en el mes de enero 2008 le descontaron
$2.90 y en febrero 2008 $ 5.33 pesos. Pregunto: ¿hasta cuándo tendrá mi mamá que aguantar tal
descuento o, mejor dicho, tal estafa de un tal señor Julio Garlalde, con domicilio en calle Alsina
440 6º B de Capital Federal, que figura como Cooperativa de vivienda, crédito y consumo Ferromar?
Quiero saber por qué la Ansés permite que le metan la
mano en el bolsillo de los jubilados.




























