El gobierno nacional debe hacer respetar la ley y por ende debe de arbitrar los medios legales existentes en la Constitución nacional para establecer el orden institucional y llegar a un acuerdo con los huelguistas. Ya que estamos con el tema del campo, vayamos al grano directamente, de acuerdo a informaciones aparecidas en los medios públicos desde cinco años atrás los productores del agro han solicitado al Banco Nación créditos hipotecarios para poner en funcionamiento las tareas rurales, créditos éstos que nunca terminan de pagarse, que siempre son renovados y a veces, como ocurrió allá por el año 2000, corrían el riesgo de que se le remataran sus campos y entonces fueron a pedir encarecidamente al gobierno el salvataje de los mismos. Algo que el gobierno hizo y en esta oportunidad en vez de que sea recíproco el tratamiento por parte de los chacareros, no lo hacen. Ya esta situación compromete a la constitucionalidad del país, es decir que estaríamos en una actitud anárquica y extorsiva por parte de estos señores a quienes evidentemente el país y sus habitantes les interesan muy poco. Están más preocupados por llenar sus arcas, porque la huelga sigue en las rutas argentinas pero en los campos la cosecha se está levantando y es evidente que lo hacen para venderla a sus socios que la compran. Y que ya la tienen vendida al exterior.