Los cuatro detenidos el viernes pasado tras un asalto, persecución y tiroteo en el barrio Floresta seguirán encerrados luego de que el juez Juan Andrés Donnola les dictara prisión preventiva sin plazos.
Los cuatro detenidos el viernes pasado tras un asalto, persecución y tiroteo en el barrio Floresta seguirán encerrados luego de que el juez Juan Andrés Donnola les dictara prisión preventiva sin plazos.
El hecho se desencadenó a las 8.15 del viernes cuando una pareja salió de su casa de Laflor al 9200 para llevar a su hijito al jardín. Antes de salir la dueña de casa se asomó por la ventana para corroborar que nadie intentara asaltarla. Horas después comprobaría que la inusitada tranquilidad de sus perros se debía a que les habían tirado unos chorizos con tranquilizantes.
"Cuando mi hija salió con el nene para subirse al auto, los ladrones le saltaron desde arriba del techo y la agarraron de los pelos", explicó entonces la madre de la víctima. A punta de pistola, el matrimonio y el nene fueron obligados a entrar a la casa y los ladrones les exigieron: "Danos las 600 lucas o nos llevamos al pibe". El dueño de casa respondió que sólo tenía 10 mil pesos, pero eso no convenció a los intrusos que le asestaron culatazos en la cabeza. Luego encerraron a la familia en una pieza y comenzaron a recorrer la casa en busca de dinero.
"No se dieron cuenta de que mi hija tenía el celular y ella le envió un mensaje a una vecina que activó la alarma comunitaria. Cuando uno de escuchó la alarma empezó a gritar «vamos que se pudrió todo»", relató la madre de la víctima.
Los ladrones huyeron en un Ford Fiesta bordó cuya patente fue anotada por la mujer que llamó al 911. Con ese dato, policías de Comando avistaron en el auto en San José de Calasanz al 9200, donde comenzó una persecución que se prolongó por cuatro kilómetros en los que hubo al menos dos cruces de balazos.
En Derqui y la colectora de Circunvalación, los hampones se toparon de frente con una camioneta de la policía y el Fiesta terminó incrustado contra unas rejas. Cuando los hampones quisieron huir corriendo hubo otro tiroteo que terminó con los cuatro detenidos y dos de ellos heridos: Fernando G., de 30 años, recibió balazos en el brazo y la pierna derecha; Marcelo A., de 42, tenía un disparo en la zona lumbar. En tanto Gabriel Alejandro O., de 42, y Héctor Oscar A., de 33, cayeron cuando intentaban perderse entre los pasillos de un complejo habitacional. En su poder se secuestraron cuatro armas: una pistola calibre 11.25, otra calibre 3.80 y dos revólveres calibre 38. Y el Fiesta bordó resultó ser robado.
Ayer a la mañana los fiscales David Carizza y Silvia Castelli los imputaron de robo doblemente calificado por el uso de arma de fuego y comisión en poblado y en banda. También les endilgaron portación ilegítima de arma de fuego de guerra y de uso civil, resistencia a la autoridad agravada por el uso de arma de fuego y privación ilegítima de la libertad de una de las víctimas.