La Justicia rechazó morigerar la detención de uno de los acusados por el homicidio de Fabricio Zulatto, un joven jugador de futsal asesinado hace cuatro meses en la zona noroeste. La defensa de Omar "Pilo" Motier, imputado como coautor del crimen por el que también está detenido Andrés Soza Bernard como presunto instigador y partícipe, había realizado una propuesta de arresto domiciliario. Pero el juez José Luis Suárez no la aceptó y así el cartonero de 30 años continuará en prisión.
El pasado jueves 11 de agosto Fabricio fue hallado muerto de tres tiros en el cráneo en el pozo ciego de un rancho de Génova al 2100. El joven de 21 años había salido de su casa el martes 9 en su auto y su último rastro fue un mensaje que envió por celular a su novia que estaba de viaje. Su desaparición fue denunciada al día siguiente, horas antes de que el auto apareciera estacionado en Suipacha al 700 sin la patente delantera. Para entonces la pesquisa había establecido la vinculación del caso con un búnker de Génova al 2100 donde se halló el cuerpo y apresaron a dos hombres: Motier y José Luis G., ambos cartoneros que al parecer vendían drogas allí.
Motier fue imputado como coautor de homicidio calificado por promesa de remuneración y G. fue acusado de encubrimiento. Este relató que la tarde del martes se había encontrado con Pilo y Soza Bernard tapando un pozo en ese rancho. Explicó que Andrés había comprado el lugar y proveía la droga que allí se vendía. Y deslizó que le había ofrecido a Pilo 20 mil pesos para matar a Fabricio, con quien tenía problemas.
Una vez identificado Andrés como Soza Bernard —fue registrado por una cámara de vigilancia cuando dejaba estacionado el auto de la víctima— se estableció que estaba cumpliendo en libertad condicional una condena a 13 años por haber asesinado a su novia en 2008. El hombre de 31 años fue apresado el 17 de agosto y dos días más tarde fue imputado como instigador y coautor del homicidio.
Según la teoría que en ese momento presentó el fiscal Adrián Spelta, la tarde del martes 9 de agosto Soza Bernard hizo que Zulatto lo llevara en su auto hasta el búnker de Génova donde lo esperaba Motier, "con quien ya había acordado el asesinato de Fabricio por 20 mil pesos".
Según la pesquisa, Zulatto y un grupo de amigos tenía contacto directo con Soza Bernard, a quien recurrían para que les suministrara drogas. Al parecer, no era esa la primera vez que la víctima llevaba al dealer hasta el búnker.
En virtud de testimonios, se determinó que en uno de esos viajes se habría originado un conflicto entre Andrés y Fabricio. Al respecto, un conocido en común aportó un mensaje de Soza Bernard en el que le advertía: "¿Qué le pasa a tu amigo? Tengo ganas de pegarle un tiro". El testimonio del "arrepentido" José Luis G. también fue determinante a la hora de cerrar las imputaciones.
Soza Bernard se declaró inocente y esgrimió que su única relación con el búnker de drogas era como consumidor. Pero su versión no fue admitida y quedó detenido con prisión preventiva por el máximo de ley.
Días antes de la detención de Soza Bernard, Motier declaró en la audiencia en la que fue imputado como coautor del crimen. "No tengo nada que ver. Sólo laburo con un carro a caballo. No sé por qué me acusan", dijo mientras su defensa cuestionaba los dichos del arrepentido. Sin embargo, el juez Héctor Núñez Cartelle consideró probable la teoría de la fiscalía y agregó que, incluso aunque no hubiese cobrado el dinero supuestamente prometido por Soza Bernard, se configuraba el homicidio agravado por promesa remuneratoria y le dictó prisión preventiva sin plazo.
Casi cuatro meses después, días atrás se hizo otra audiencia para rever la medida cautelar que pesa sobre Motier, detenido en la Unidad Nº 16. Los abogados Adrián Ruiz y José Ferrara pidieron la prisión domiciliaria del cartonero y presentaron a una mujer que lo alojaría en su casa y ofrecía como garantía una moto. Además propusieron pagar una fianza de 10 mil pesos y colocarle al imputado una tobillera electrónica para que se controle el cumplimiento de la medida.
La fiscal Georgina Pairola se opuso al pedido con argumentos basados en describir los antecedentes y la evidencia. Y el juez Suárez no hizo lugar a los pedidos de la defensa y dispuso mantener la prisión preventiva de Motier "en los mismos términos en los que la venía cumpliendo".
Génova al 2100. Fabricio fue encontrado muerto en un pozo ciego.