Para Newell's jugar afuera del Coloso es una verdadera pesadilla. Un martirio que parece no tener remedio a medida que pasan los rivales y los escenarios ajenos. Porque es un equipo que no se cansa de coleccionar derrotas cuando sale del parque Independencia. Los números son lapidarios, irrefutables. En el último año calendario la Lepra jugó 15 partidos en condición de visitante y perdió 12. Lo que evidencia que fue superado casi siempre. Apenas atesoró dos empates y la única victoria la consiguió ante River, en el Monumental, con un 3 a 1 apasionante, hace ya nueve meses. Una foja de servicios bajísima para un equipo que tenga aspiraciones de pelear en el lote de arriba de la tabla.
Pero lo peor de todo no son los resultados negativos que se encadenaron casi automáticamente, sino el flojísimo rendimiento a nivel individual y colectivo de los rojinegros cuando son visitantes. Esto último explica la magra campaña. Porque en la gran mayoría de las caídas el score final se ajustó a la realidad. Y viene de arrastre. Ninguno de los últimos técnicos que pasaron por el Parque pudieron corregir este déficit. Lo padeció Juan Manuel Llop desde el inicio de la Superliga pasada, siguió en el escueto interinato de Fabián Garfagnoli y ahora Omar De Felippe está lidiando con este trauma de que su equipo es una sombra cuando sale del Coloso.
En toda la Superliga pasada el único festejo leproso fuera de casa fue ante River, en la fecha 10ª, cuando el 26 de noviembre venció 3 a 1, con goles de Luis Leal, Brian Sarmiento de penal y Héctor Fértoli, en el mismísimo Monumental.
Lo dicho, lo peor es que la mayoría de las derrotas derivan de la flojísima puesta en escena del equipo. No es casual que los jugadores bajen su rendimiento de manera sustancial, ya que en el Coloso se observa otra agresividad a la hora de disputar la pelota y una mayor vocación ofensiva para complicar al rival. Newell's luce atado afuera.
El propio DT De Felippe es el primero en reconocer el déficit y por ello en la noche del viernes, tras el estreno con derrota 2 a 0 en Liniers por la Superliga, expresó que "hace rato que arrastramos este problema de visitantes de comenzar perdiendo y después nos cuesta. Ya es algo que asusta". Además advirtió que "de local cambiamos mucho, por eso hay que modificar esto urgente cuando somos visitantes. Nos tiene muy preocupados no ganar hace nueve meses".
Después del cotejo que ganó ante River, Newell's jugó diez partidos de visitante: perdió nueve y apenas empató uno (1 a 1 ante Atlético en Tucumán). Y ya bajo el mando de Omar De Felippe los leprosos jugaron seis veces fuera del Coloso, con cinco derrotas y esa igualdad ante el Decano en el Jardín de la República, con el gol del pibe Joaquín Varela.
Lo que sostuvo a Newell's medianamente en la tabla de posiciones en el torneo pasado fue que en el Coloso jugó catorce partidos, de los cuales ganó siete, empató cuatro y perdió tres. Lo que significó un 60 por ciento de efectividad, contra el escaso 12 por ciento que rescató de visitante. Los números hablan por sí mismos. De Felippe hoy deberá solidificar la estructura del equipo jugando de visitante y a la vez tratar de potenciar el aspecto psicológico de un plantel que perdió toda la confianza cuando está lejos de casa.