Newell's fue otro. Distinto al de costumbre. No cedió un centímetro, tuvo circulación y acertó finalmente en el arco contrario. Con esos atributos fue en contra de todos los pronósticos y superó sin objeciones a San Martín de Tucumán, que armó un clima festivo por la victoria de la fecha pasada en el clásico y debió resignarse ante la superioridad leprosa.
Concentrado, atento a los movimientos del ciruja, presionando en el medio, Newell's consiguió que la pelota rara vez llegue a su arco. Los futbolistas de la lepra se repartieron con acierto cada sector del campo de juego. Fontanini se hizo más gigante que su tamaño y le ganó el duelo en las alturas a Bieler. Rivero respondió como pocas veces en el torneo. Inició todas las jugadas. La buscó, llevó, tocó y fue a buscarla. Participativo y movedizo, no dudó en trasladarla y acelerar por el medio.
El complemento ideal fue Formica. Encaró, gambeteó hacia adelante y la distribuyó. Le faltó el gol. Remató flojo ante la salida de Carranza un tiro libre de Figueroa y la tiró adonde se encontraba el arquero tras una habilitación del Negro. Mejor pateó un tiro libre que salió apenas junto al palo izquierdo.
Newell's tuvo todo controlado. Hasta los tiros de esquina en contra, un problema recurrente. Pero falló en una. Aguerre calculó mal, la pelota lo sobró y el cabezazo de Acevedo dio en el palo. Fue la primera de San Martín, recién a la media hora de juego.
Antes y después, Newell's fue firme y jugó mejor. Siguió teniendo situaciones, pese a que Fydriszewski y Fértoli, en menor medida, no influyeron en ataque en la primera etapa. El Polaco igual se reivindicó, de la mejor manera, en el segundo tiempo Figueroa recibió un centro de Formica y sin marcas cruzó el derechazo que se fue por el palo opuesto. La mala puntería continuó. La expulsión de Moreira a los 36 fue consecuencia del desconcierto de los jugadores de San Martín, impotentes porque la pelota fue mayor tiempo propiedad de la visita.
Newell's no dejó pasar la oportunidad de que el ciruja tenía uno menos. Fue con decisión y se adelantó. Figueroa mandó el tiro de esquina desde la derecha, Fontanini se elevó más alto que nadie y Fydriszewski le dio con la punta del pie por el segundo palo. La lepra convirtió así su segundo gol de visitante en el torneo.
El nerviosismo de San Martín ante la necesidad de empatar y el deseo de Newell's por mantener la ventaja derivó en un trámite friccionado, de pierna fuerte, peleado. La lepra continuó metido. Hubo alguna excepción. Nuevamente se perdieron las marcas en un tiro libre, Aguerre dudó en la salida y Acevedo se lo perdió de cabeza.
En medio de la lucha, Rivero clarificó. Tocó con inteligencia y no paró de correr. Tampoco escatimó esfuerzo. Metió y recuperó. Fydriszewski recibió de Fértoli sin oposición y tocó con displicencia sobre Carranza. No entró y desperdició la chance para definirlo. Fydrisewski le dio mejor de cabeza en un córner, pero dio en el palo.
Pasó tanto sin un triunfo afuera que Bidoglio metió a Paredes por Figueroa para hacerse fuerte atrás. No fue necesario. Alexis Rodríguez contraatacó, la dio al medio y esta vez Fydriszewski la puso con justeza sobre Carranza. Partido liquidado. Antes del final, Alexis Rodríguez le entró con precisión para un 3 a 0 impensado. Fue una caricia en un año difícil.