La jueza Brenda Madrid ordenó hoy un allanamiento en las oficinas del empresario y representante de futbolistas Christian Bragarnik, implicado en la causa de asociación ilícita en perjuicio del club Independiente como posible financista de la barra brava.
Bragarnik, uno de los representantes de moda del fútbol argentino, es el actual representante, entre otros, de Diego Cocca, el actual técnico de Central.
El operativo se realizó a pedido del fiscal Sebastián Scalera en el exclusivo barrio de Puerto Madero y en simultáneo a la requisa que tuvo lugar en la sede del gremio de Camioneros debido a la imputación que pesa sobre los sindicalistas Hugo y Pablo Moyano, presidente y vice primero de la entidad de Avellaneda.
Bragarnik fue señalado en la causa como responsable de entregar dinero a la barra brava de club a cambio de favorecer a técnicos y jugadores representados en el trato dispensado por los violentos, informaron fuentes judiciales.
El fiscal Scalera trabaja sobre la hipótesis de que la barra de Independiente desarrolla un método extorsivo con los integrantes del plantel de fútbol profesional, salvo con aquellos que están bajo la tutela de Bragarnik.
La acusación hacia el representante fue realizada en la causa en 2017 por el titular de la Agencia de Prevención contra la Violencia en el Deporte (Aprevide), Juan Manuel Lugones.
Bragarnik, el representante más poderoso del fútbol argentino, maneja en el país a más de 100 jugadores y 15 técnicos (entre ellos Diego Cocca), gerencia informalmente a Defensa y Justicia y asesora deportivamente a varios clubes, entre ellos Boca y Racing, de cuyos presidentes, Daniel Angelici y Víctor Blanco, es amigo.
Su nombre apareció por primera vez en la causa en 2017, cuando Juan Manuel Lugones, titular de la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (Aprevide), lo mencionó como posible financista de varias barras, entre ellas la de Independiente. Scalera hizo suya la hipótesis y seis meses atrás, cuando pidió la detención de Pablo Moyano, también solicitó el allanamiento de Bragarnik, bajo la convicción de que "existe una fuente de financiamiento de los barrabravas que consiste en apretar a jugadores y técnicos de fútbol, mencionándose como fuente de financiamiento a Christian Bragarnik, quien les suministraba a los barras dinero a cambio del manejo y control de la tribuna al mismo tiempo de asegurarse que los jugadores y técnicos que él representaba quedaban libres de esas agresiones".
Bragarnik tenía, por entonces, varios futbolistas representandos en el plantel de Independiente (Víctor Cuesta y Leandro Fernández, entre otros) y había llevado como entrenadores a Jorge Almirón primero y Ariel Holan después, aunque el vínculo con este último finalizó poco tiempo después.