Hay vicios del periodismo que son insoportables. Los malos vicios en la profesión de comunicar son de larga data pero se ven mucho más ahora, cuando hay una pandemia que no sólo se lleva la vida de la gente sino que también se lleva puestos ciertos códigos éticos, estéticos, conceptuales y, por qué no, ideológicos del periodismo.
La primera mala costumbre es esto de “informemos primero”. Es decir, conviene llegar antes a los portales. Y hago hincapié en los portales porque desde el “boom” de la web, las redes sociales y los algoritmos, se desató una locura por publicar “antes que nadie” que, en los buenos tiempos del periodismo gráfico, el de diarios, el de papel, no existía.
Digamos que se prioriza publicar primero que cuando lo hace el medio de enfrente o del costado sin importar que la información sea buena y exacta. Los ejemplos sobran, y no sólo en la Argentina. Días atrás se informó en portales estadounidenses la muerte de Tanya Roberts, la bella estrella de las películas de James Bond, y...no estaba muerta. Murió un día después, pero lo comunicaron un día antes, total, el tema era publicar primero: una barbaridad.
En Rosario, como en todo el país, las actividades artísticas y culturales estuvieron suspendidas por las medidas protocolares desde marzo de 2020. Hasta que, esta semana, el Anfiteatro Municipal Humberto de Nito, favorecido por el amplio espacio de ese foro cultural ubicado en el Parque Urquiza y por ser un lugar al aire libre, habilitó ayer los shows en vivo, ahora llamados presenciales. Notición. Después de casi diez meses, los artistas podrían tocar ante su gente, y esa misma gente podría a la vez salir a ver un espectáculo cara a cara con sus músicos preferidos. De hecho, ayer se presentó Mercedes Borrell junto al Cuarteto Aureo en un homenaje a María Elena Wash con entrada gratuita y se agotaron las mil localidades disponibles.
Pero el Covid no descansa y siempre ataca de nuevo, y esta vez le tocó a Mamita Peyote, que iba a tocar hoy junto a Rosario Smowing, en el primer concierto con entrada paga, para darle un alivio a los músicos locales tan castigados en esta pandemia. Lo antiético, lo amarillo, lo bochornoso, fue que muchos portales, incluso la página web de Télam, eligieron titular primero con los casos de Covid de Mamita Peyote en vez de anunciar que volvían las actividades después de casi 300 días. Las dos noticias son reales, es cierto, pero, según los códigos de cierto periodismo, “garpa más” titular con la mala noticia, se lee más, impacta mejor en los lectores. Mirá vos.
Hay vicios del periodismo que son insoportables. Es tiempo de repasar los viejos manuales que leíamos en la facultad para aprender a contar también las buenas noticias. A la opción de informar antes y mal, es preferible comunicar bien y después. Ese sí es un buen vicio.