Al cabo de dos maratónicas jornadas de negociaciones, prolongadas por una
seguidilla de cuartos intermedios, el gobierno santafesino formuló anoche un ofrecimiento salarial
a los maestros provinciales que oscila entre el 13,5 y el 16,82 por ciento de aumento según la
antigüedad. A esto se sumará el pago de 250 pesos remunerativos y bonificables "en reconocimiento a
la función docente" que se cobrarán por única vez, de ser aceptada la propuesta, con el salario de
febrero que se percibe en marzo. El ofrecimiento fue visto con buenos ojos por el gremio, que
evaluará este viernes en una asamblea provincial si lo acepta y finalmente las clases comienzan sin
novedades el lunes.
En concreto, sobre la mesa de negociaciones la ministra Elida Rasino tiró sus
últimas cartas: para un maestro de grado de categoría inicial la oferta representará un incremento
de bolsillo del 13,5 por ciento, lo que llevará el salario de 1.630 pesos a 1.850.
Los números son distintos para un docente con una antigüedad que supere los 25
años, en cuyo bolsillo la oferta trepa al 16,81 por ciento y lo lleva de 2.258 a 2.638 pesos.
A estos incrementos hay que sumar un monto de 250 pesos remunerativos "en
reconocimiento a la función docente", que será percibido obviamente si se acepta la propuesta.
"Hicimos todos los esfuerzos para lograr una oferta que tuvo una recepción
favorable por parte de los gremios", remarcó anoche la ministra Rasino al salir de la reunión
paritaria. La funcionaria dejó en claro que "esta será la única negociación salarial del año".
A renglón seguido, subrayó que los índices de los incrementos propuestos
"superan a los inflacionarios" y se mostró confiada en que el lunes finalmente comenzarán las
clases.
A su turno, la secretaria general de Amsafé, Sonia Alesso, consideró que la
oferta fue "superadora", teniendo en cuenta que al comienzo de la jornada el gobierno había
planteado sólo un 10 por ciento de incremento salarial. Redoblada la apuesta oficial, Alesso
destacó que "la oferta mejoró ostensiblemente la propuesta inicial y recuperó la carrera docente,
porque no estableció montos y porcentajes fijos".
Si bien no arriesgó que la propuesta será aceptada por la asamblea del viernes,
a juzgar por los rostros de los delegados que anoche estaban en la mesa paritaria que se desarrolló
en la capital provincial, todo indica que será aceptada y el lunes las clases comenzarán con
normalidad.
Cronología. Las negociaciones iniciadas el lunes se habían reanudado a media
mañana de ayer, impugnación del gremio UDA mediante y marcando el debut de la flamante comisión
paritaria del sector docente instaurada por la ley votada el año pasado en la Legislatura
santafesina.
Luego del cuarto intermedio dispuesto la noche del lunes para "sintonizar" la
propuesta de la Casa Gris con el acuerdo cerrado en la paritaria nacional del sector, ayer
volvieron a sentarse con la ministra de Educación a la mesa de diálogo montada en la sede del
ministerio de Gobierno y Reforma del Estado, en el microcentro de la capital santafesina, los
dirigentes de Amsafé y Sadop.
Tal como ocurrió en la primera jornada, en la víspera también se sucedieron tres
cuartos intermedios. El primero se extendió desde el mediodía hasta las primeras horas de la tarde,
lapso en que la ministra mantuvo diversos contactos con funcionarios de Hacienda de la Casa Gris
para "alcanzar la mejor propuesta posible", según deslizaron fuentes oficiales.
Posteriormente hubo otra "impasse" que se produjo a media tarde, cuando los
dirigentes gremiales se retiraron con gesto adusto a deliberar luego de que se conociera la primera
cifra tentativa del 10 por ciento de incremento salarial. La última oferta llegó pasadas las 21 y
esta vez hubo gestos más relajados. Ahora la decisión la tienen los maestros y la tomarán el
viernes.
Testigo
Si bien a partir de los próximos días se aguarda la convocatoria del gobierno
provincial a las paritarias de los agentes públicos (UPCN y ATE), la negociación iniciada con los
docentes establece una pauta testigo para las restantes reuniones salariales a partir de las cuales
la Casa Gris intenta despejar cualquier tipo de turbulencia financiera.