El vínculo que se construye entre las familias y los bebés es único. Son muchas las disciplinas pensadas para fortalecer esa unión, una de ellas es el llamado "family dance babys". Se trata de una clase de danza que se realiza con el niño a cuestas, envueltos en la clásica mochila portabebés o fular ergonómico. Si bien no es un fenómeno nuevo, llegó a Rosario hace muy poco tiempo y tuvo muy buena recepción entre las madres.
Selene Di Pietro tiene 38 años y es docente de nivel inicial, pero actualmente no ejerce. Desde este año decidió apostar a "Animate Fit", un espacio que coordina junto a Carla Di Marco, ubicado en Corrientes al 144. Aunque es instructora de ritmos desde hace mucho tiempo y le da clases a grandes y chicos, nunca había probado con bebés. La idea se la dio una amiga suya que le compartió un video en redes sociales y ella decidió animarse.
Hace unos pocos días convocó a una clase de "family dance babys" y el recibimiento fue muy bueno. Las imágenes de la clase son muy tiernas: los pequeños, entre el mes y el año de vida, abrazados a sus mamás, algunos dormidos y otros despiertos y los cochecitos estacionados. Las sonrisas no faltaron. El éxito fue tanto que sumaron un día más para que nadie se quede afuera.
Las madres llegaron al espacio relajadas, se ayudaron a ponerse los fulares entre ellas y reforzaron el significado de comunidad. Todas remarcaron lo difícil que es encontrar opciones relacionadas a la actividad física para quienes han parido recientemente.
La música que suena en las clases es variada. Las familias bailan desde merengue hasta disco, pasando por el cuarteto y la cumbia. Se realizan pasos sencillos y las madres van haciendo un trabajo continuado, sosteniendo un ritmo, que para el bebé "es algo muy agradable porque se va conectando con la respiración de la mamá".
"La actividad consiste en bailar con nuestros hijos. No se pone música fuerte, es un ambiente muy tranquilo. La madre hace la actividad física, sin tener que dejar a su hijo en otro lado, y después se conecta con esa relación entre mover el cuerpo y el vínculo con el hijo", contó Selene a La Capital.
La joven dijo que "tiene mucha conexión con los bebés", además de ser docente inicial, su mamá tiene un jardín desde hace 40 años. "Imaginate, nací con los chicos y siempre estuve muy cerca de ellos", señaló.
Maria Eugenia Nuñez Pierpaoli es abogada y docente. Vito es su primer hijo y se animó a participar de la clase de danza. "Me permitió conectarme con Vito, a quien le encanta la música. Cuando me ve baila y mueve las patitas y manitos. Compartir esta actividad con él es hermoso", indicó.
En ese sentido, explicó que "es muy difícil ponerlo en palabras, porque hay que sentirlo y estar ahí". Valoró que se trata de "una actividad preciosa, en la que no necesitás tener estado físico o entrenamiento de algún tiempo". Las madres pueden empezar desde cero, aunque no hayan bailando nunca, y empezar a moverse junto a sus pequeños.
"Siempre invito a todas las mamás que tienen bebés a que se sumen a la clase porque la verdad que se disfruta mucho", destacó. Quienes quieran probar la experiencia pueden inscribirse en Animate Fit, por ahora las clases son los miércoles a las 16.30 y los sábados a las 11 de la mañana.
Como mamás-canguro, cada vez más rosarinas se animan a ponerse en movimiento y entrenar el cuerpo "porteando" a sus hijos al ritmo de la música.
Para todas las edades
La idea es que los chicos de todas las edades puedan disfrutar de las experiencias que ofrece Animate Fit. "El viernes 20 vamos a dar la primera clase a familias. Pueden participar padres, tíos, abuelos, primos, quien quiera sumarse y probar esta actividad. El método se llama "Alma creativa" y se divide en etapas. Hacemos juegos de teatro emocional, algo de expresión corporal y movimientos de danzas y finalmente un rato de meditación", precisó. Los convocados para esta actividad son los niños entre seis y once años.
Selene probó ese método en un geriátrico y sostuvo que los adultos mayores y los chicos tienen mucho en común y hay que tenerles paciencia. "Los resultados fueron fabulosos", narró. "Hay que resaltar la importancia de crear un vínculo desde el cuerpo, poder sacar las emociones afuera. Muchas veces las familias no entienden a sus hijos o no saben cómo interpretar lo que les está pasando. Justamente la idea es crear un espacio para potenciar ese vínculo con los niños y pasar un buen momento juntos", concluyó.