La inflación hizo que productos indispensables para la vida cotidiana tengan precios que producen taquicardia.
Todo aumenta, todo el tiempo, en todas partes. Como el título de un filme galardonado al Oscar, los argentinos enfrentan por estos días incrementos de precios de manera constante. No solo suben los servicios básicos, el transporte, las cuotas de colegio o la tarifa de taxi. Hasta los productos indispensables y cotidianos se ofrecen a precios delirantes. Con una inflación permanente y en aumento, la economía doméstica es un dolor de cabeza.
Fuera de las compras semanales o mensuales, los productos cotidianos muchas veces se compran de urgencia en el kiosco o mercadito más cercano o que esté de paso. La necesidad obliga a no pensar en ahorrar sino en solucionar la urgencia. El problema es que al pagar la realidad te da un baño de agua helada.
Es frustrante ver cuánto aumentaron los precios de los productos, aunque quisiéramos, no podemos dejar para más tarde. Desde las pilas hasta las toallitas femeninas tienen precios que lucen, ante los bolsillos flacos, de alta gama y con la economía hogareña maltrecha se apela a una estrategia mínima pero eficaz: adiós a los blisters y las caja hola a las compras por unidad .
En diálogo con La Capital, el presidente de la Cámara de Kiosqueros de Rosario, Marcos Difilippo sostuvo: “El producto que más sale siempre son los preservativos y la cerveza. Ahora, en época de mosquitos, hay una gran demanda de repelente". Por otro lado, contó que "lo que menos se están vendiendo son productos de perfumería como las maquinitas de afeitar o las toallitas femeninas donde son ventas más por necesidad ya que la gente se vuelca a otro tipo de negocios para abastecerse”.
A continuación, un repaso por algunos artículos cotidianos y su costo en los kioscos (donde se venden por unidad, sin packs ni ofertas que alivien el precio):
¿Cuántas veces queriendo cambiar el canal de la televisión o intentando prender el aire acondicionado dejó de funcionar el control del aparato? Salir a comprar pilas es un desafío para cualquier consumidor. En Rosario, la unidad varía entre los $550 y $650, según la marca.
A lo hora de los cuidados durante una relación sexual es fundamental el uso de profilácticos. La primera marca tiene un valor de $1500 el pack mínimo de 3 unidades.
Entre los $550 y $750 cuesta el paquete de toallitas que necesita una persona para cubrir sus necesidades durante el período.
El repelente de insectos, uno de los productos más solicitados por los rosarinos durante la invasión de mosquitos, ronda los $1650. Hay que clarar que su costo puede variar según el tipo de producto: puede ser en crema, spray o el extra duración.
Las rasuradoras son siempre necesarias, y son para muchos grandes aliadas durante el verano. La unidad ronda los $550.
Dentro del mercado existe una gran variedad de este artículo de necesidad básica. Según la composición, la cantidad de capas y la textura, entre otros ítems, su precio será más bajo o más alto. Pero cualquiera que necesite un rollo -es decir, todo el mundo- debe considerar de base gastar unos $1000.
La bebida indispensable para combatir las calurosas noches rosarinas puede hallarse desde el formato lata o también el de la vieja escuela, en botella de vidrio. Este producto cuenta con un precio de $800 la lata y alrededor de $1500 el porrón de litro.
Por Claudio Berón