Durante la recorrida oficial efectuada hace pocos días por obras clave en materia de seguridad y en accesos a la ciudad, el gobernador Omar Perotti remarcó la importancia que tienen los trabajos que se están desarrollando en la avenida Jorge Newbery, desde Circunvalación hasta Wilde, a la altura del barrio 7 de Septiembre. Las autoridades santafesinas entienden que esas tareas representan un vital aporte para esta conexión vial que le otorgará una mayor fluidez vehicular y una mejor conectividad a la zona noroeste rosarina con el aeropuerto y las vecinas localidades de Funes y Roldán.
Con dos carriles y un bulevar central en el que se implementará una bicisenda, este nexo se transformará en una vía de alto significado urbano en esta unión trascendental, que tejerá las zonas oeste y norte de la ciudad.
“Para nosotros es prioritario avanzar en este tipo de obras, que hacen más simple la circulación de los automovilistas. Con el gobernador y la ministra Silvina Frana nos proponemos renovar este tipo de desafíos. Seguiremos trabajando para tener avenidas más confortables y seguras, que puedan conectar distintas zonas de la ciudad, contribuyendo a la conectividad por la que trabajamos en la provincia”, se encargó de remarcar, Oscar Ceschi, administrador de Vialidad provincial.
A pesar de las dificultades económicas que impone esta etapa de pandemia por el coronavirus, las autoridades provinciales igual dieron el visto bueno para que arranquen los trabajos correspondientes a la primera etapa de esta remodelación integral.
Vale precisar que la Dirección Provincial de Vialidad, perteneciente al Ministerio de Infraestructura, Servicios Públicos y Hábitat de Santa Fe, está ejecutando las obras. El tramo inicial de intervención es de 1.300 metros lineales, que se extienden desde avenida de Circunvalación hasta Wilde.
Según subrayaron las autoridades, estas obras contemplan una inversión total de 454 millones de pesos.
Como se pudo apreciar en la recorrida del miércoles anterior, las tareas ya presentan un avance que supera el 25 por ciento, y ya se comenzó con la demolición de la traza existente, de 7,50 metros de ancho con zanja en ambos costados.
Allí, posteriormente se ejecutará una avenida más importante, de dos calzadas de hormigón de 9,20 metros de ancho cada una. Y el plan de trabajos incluye la construcción de veredas, cordones y cantero separador forestado, que contempla la presencia de una ciclovía asfáltica, que beneficiará y les otorgará mejores condiciones de seguridad a quienes se trasladan a diario en bicicleta por esa vía.
También se realizará la renovación de desagües pluviales, relocalizaciones de servicios, la iluminación con tecnología led en su totalidad, nueva semaforización, y señalizaciones horizontales y verticales.