“Scioli y Macri, por limitaciones propias y contextuales, no han podido crecer sobre el voto de Massa y De la Sota”, observa el consultor Fabián Perechodnik. Señala que el candidato del Frente para la Victoria es el favorito, con probabilidades de ganar en primera vuelta —superando el 40% y sacando 10 puntos de ventaja al segundo—, pero aclara: “Si Massa no estuviese en la grilla de candidatos, Scioli hubiera tenido más probabilidades de ganar en primera vuelta”. En caso de ballottage, el ex motonauta también es quien tendría más chances ya que —explica— “es quien menos rechazo genera en los argentinos de los tres candidatos más importantes”. Para Perechodnik, “el tema central que subyace a la elección es el rol que debe cumplir el Estado en la vida de los argentinos”.
—Hay encuestadores que hablan de que la gente todavía no se puso a pensar mucho en las elecciones. ¿Lo observan así, y por qué?
—La campaña electoral de este año es sumamente larga y los temas se van sucediendo al tope de la agenda a un ritmo sumamente vertiginoso. Desde la muerte del fiscal Alberto Nisman, hasta el “caso Niembro” estas últimas semanas o la impugnación de la elección tucumana son muchas las cuestiones que han ocupado el espacio central del debate político. En las semanas que restan hasta las elecciones generales seguramente surgirán nuevos acontecimientos que necesariamente van a tener un impacto en las preferencias electorales de los votantes. A la fecha, con el antecedente de las Paso, sabemos cuál es la estructura general de las preferencias electorales, lo que aún no puede ser precisado es si las diferencias de las Paso se van a estrechar o estirar. Es habitual que la mirada de la mayoría de la gente se acerque al proceso electoral en las últimas semanas. Lo que muchas veces se denomina “circulo rojo” o “microclima”, entre los que se destacan periodistas, analistas, dirigentes políticos y empresarios, siguen el día a día de la política con mucho detalle. La inmensa mayoría de la opinión pública no.
—Mencionó el “caso Niembro”, ¿tuvo algún impacto en la intención de voto?
—Nuestra primeras mediciones señalan hasta el momento un impacto moderado del “caso Niembro” en el electorado de Cambiemos. De todos modos, son votos importantes que pueden definir si hay o no segunda vuelta, de ahí el apartamiento de Niembro de la candidatura a diputado. A medida que se acerca la fecha de la elección, el juego de los candidatos pasa a ser no equivocarse o equivocarse menos que el adversario. Evidentemente la situación de Niembro más allá de las cuestiones numéricas ha tenido fuerte impacto en las actitudes de los protagonistas de Cambiemos y ha limitado su campaña en estos días. Por ahora hay un efecto más cualitativo que cuantitativo en esta situación. De todas maneras, el impacto en la opinión pública siempre tiene una demora o lo que llamamos esperar el efecto decantación. Faltan unos días para tener una evaluación cerrada.
—A Bill Clinton sus asesores le escribieron en un pizarrón “es la economía estúpido”, ¿hoy qué deberían escribirle a Scioli o Macri?
—Naturalmente no es un solo tema, sino una agenda de cuestiones que es dinámica y que va fluctuando con la coyuntura. A riesgo de simplificar demasiado la cuestión, diría que el tema central que subyace a la elección es el rol que debe cumplir el Estado en la vida de los argentinos. Buscando esas palabras o frase yo diría que para Daniel Scioli sería “la etapa del desarrollo argentino” y para Mauricio Macri sería “el cambio de la Argentina”.
—Muchos consideraban que las Paso oficiarían como una primera vuelta y que se llegaría a la elección general con una polarización. Finalmente parece no darse así. ¿Ustedes qué registran al respecto?
—En este turno electoral, las Paso no lograron resolver o anticipar resultados para las elecciones generales como sucedió en las otras ocasiones. Realmente no ha habido grandes cambios en las encuestas si las comparamos con los resultados de la Paso. Scioli y Macri, por limitaciones propias y contextuales, no han podido crecer sobre el voto de Massa y De la Sota, y en rigor se encuentran abocados a defender los votos obtenidos en las primarias. Este es un escenario beneficioso para Massa que se mantiene expectante con un caudal electoral nada despreciable. Aun más, Massa es el que mejor desempeño posterior a las Paso ha tenido.
—En las Paso Scioli quedó muy cerca del 40% y de los 10 puntos de diferencia al segundo. La tendencia se iría hacia ese lado o Macri podrá remontar los 3 millones de votos que lo separan de Scioli?
—Hoy por hoy, Scioli lidera todas las encuestas, el tema de análisis es si conseguirá crecer unos puntos más aún en comparación con las Paso para lograr más del 40% de los votos y una diferencia superior a 10 puntos por sobre Macri. Es un escenario todavía abierto pero con tendencia favorable a Scioli, aunque pareciera que una porción muy chica del electorado podría definir si hay ballottage o no.
—¿Siguen observando ese escenario de tercios en la opinión pública: fieles K, anti K furibundos y neutrales?
—Como en toda elección hay una mayoría mucho menos politizada e ideologizada que decide por su afinidad personal con los candidatos, su situación socio-laboral, el márketing, los temas de campaña, es absolutamente normal. En el marco de esta segmentación, más de la mitad de la opinión pública decide querer elegir un candidato que mantenga cosas positivas de esta etapa y cambie otras. La elección se define básicamente en este segmento.
—¿Por qué Scioli no puede llegar al 54% de CFK en 2011, más allá de las diferencias personales? Se supondría que el voto K puro lo tiene y su perfil podría seducir a moderados.
—Ocurre que el candidato no es el mismo y el contexto es distinto. Cristina Kirchner tampoco lograría el 54% si fuera candidata nuevamente. Las elecciones las definen los contextos. Las demandas y estilos de liderazgos también se adecuan a los contextos.
—Duran Barba dijo que si Macri acordaba con Massa, le facilitaba la tarea a Scioli que sumaba un tercio del 20% de UNA y así llegaba al 47% y ganaba en primera vuelta.
—Si, a medida que se concentra la oferta electoral crece la probabilidad de que alguna fuerza supere el 45% de los votos. Si Massa no estuviese en la grilla de candidatos, Scioli hubiera tenido más probabilidades de ganar en primera vuelta.
—¿El voto de De la Sota a dónde va?
—Por ahora Massa está haciendo un buen trabajo para retener la mayoría del voto delasotista. El espacio UNA parecía haber mejorado su posicionamiento post Paso. De cualquier manera, ese es un voto con alto componente peronista y habrá que ver a medida que nos acerquemos al 25 de octubre como se comporta.
—¿El ballottage complicaría a Scioli? ¿Podría Macri sumar todo lo “no K”?
—Es seguro que Macri crecería en un eventual ballottage sumando gran parte del voto opositor. Lo que no está claro es si ese crecimiento le va a alcanzar para superar a Scioli. Hay muchos factores como el voto blanco, el ausentismo o el voto anti-Macri que pueden terminar por definir una segunda vuelta. Haciendo un análisis de los pisos y techos de los candidatos, o sea aquellos que dicen que votarían por alguno de ellos o potencialmente podrían votarlo y aquellos que dicen que nunca votarían por ese candidato es lo que se denomina piso y techo. Daniel Scioli hoy es el candidato que tiene el techo más alto, o sea que tiene el menor nivel de rechazo rondando el 45%. En tato Macri y Massa están en 51% y 55% de rechazo. Estos datos son una guía para el eventual ballottage. Podría decir que ninguno de los candidatos, a priori, está más complicado que el otro para pasar la eventual segunda vuelta.
—Santa Fe era uno de los distritos que, junto con Capital, Córdoba y Mendoza, aparecía como contrario al Frente para la Victoria, pero aquí el más votado fue Scioli. ¿Puede Santa Fe ser decisiva?
—En Santa Fe, Mendoza y la ciudad de Buenos Aires el escenario está bastante estable. Los distritos donde puede haber sorpresa son Córdoba,donde en las Paso ganó De la Sota que ya no está en carrera, y la provincia de Buenos Aires donde el FPV hizo una elección deslucida. Con un mejor desempeño del oficialismo en provincia de Buenos que tiene el 38% del padrón los resultados pueden modificarse.