“Martes 13, no te cases ni te embarques, ni de tu casa te apartes”, reza el dicho popular. Y son tantos los que creen fervientemente en el mito que hoy, sumado al desgraciado 2020, logró encabezar el podio de las tendencias argentinas en las redes sociales.
Memes, frases ingeniosas e imágenes de todo tipo cayeron como una catarata sobre las cabezas de los usuarios de Twitter, Instagram y Facebook. “Cuando es martes 13 pero vos ya tuviste mala suerte todo el 2020”, twitteó un usuario junto a una foto del personaje Bart Simpson con un tapaboca.
Es que el 2020 se llevó todos los premios para una nueva jornada de mala suerte ya que los millennials lo describen como uno de “los peores años de la historia” y cada día hay un nuevo meme en referencia al año que estamos transitando. “Martes 13. Un martes 13 en 2020. Suerte a todos”, publicó un perfil de Instagram.
Si bien en algunos países se trasladó al viernes 13, en Ecuador, Argentina, Uruguay, México y otros lugares de habla hispana se considera al martes 13 el día de la mala suerte. Se cree que el mito nació debido a creencias mitológicas provenientes de Egipto y Grecia, en las que el nombre “martes” se considera de “mal agüero” porque fue creado en consagración del Planeta Marte y al dios Marte, relacionado a la sangre, la destrucción y la violencia.
Además, el número 13 está asociado a la desgracia por las referencias que tiene en el Apocalipsis, por hechos como el que sucedió en la Última Cena, en la que eran 13 personas en la mesa y uno de los 12 apóstoles resultó ser Judas. En cuanto a las cábalas, es considerado “el demonio”.
Por otro lado, también hay elementos y acciones que se asocian a la mala suerte como los gatos negros, que se caiga el salero y derrame sal, pasar por abajo de una escalera, cuadros torcidos, poner el pan boca abajo, espejos rotos o abrir el paraguas en el interior, entre otras cosas.
La realidad es que ninguno de estos hechos está científicamente comprobado como para adjudicarlos a la mala racha, pero al estar tan instalados en la sociedad así como muchas otras convicciones, muchos eligen creer.