Vestuario del estadio del Bicentenario tras la derrota ante Desamparados. Pizzi en conferencia de prensa, dijo: "Voy a exigir el máximo de compromiso. El que pueda darlo estará y el que no, no". Ayer, pasado el mediodía, ya se conocía lo que el técnico canalla había puesto en la cancha pensando en San Martín de San Juan: un equipo con cinco modificaciones. La consulta de Ovación fue directa sobre si aquellas palabras de hace un par de días tenían que ver con esta decisión o simplemente se debía a la posibilidad de apostar a "gente más fresca" como indicó al comienzo de la charla. Su respuesta fue: "Noto en todos el compromiso que les reclamo y la formación pasa por una cuestión de elección mía y no por ese motivo. El compromiso de todos ya quedó demostrado en estos últimos tres o cuatro días". Contextualización al margen, el ensayo futbolístico de ayer en el Gigante mostró la variación de medio equipo. A la cancha fueron Franco Peppino, Omar Zarif, Federico Carrizo, Andrés Alderete y Javier Toledo. Al margen se quedaron Nahuel Valentini, Ricardo Gómez, Santiago Biglieri, Federico Vismara y Antonio Medina.
Nada se descubre si se dice que Pizzi no quedó conforme con lo que hizo su equipo en el último partido. Por eso comenzaron las especulaciones de que podía haber algunas variantes. Las hubo. Por ahí no se imaginaban tantas, pero el DT decidió ir a fondo con el bisturí. Igualmente no hay que dejar de lado la posibilidad de apostar por aquellos que vienen con menos exigencia y, por ahí, renovar las caras para el choque de vuelta.
De arranque, el dibujo táctico no sufriría modificaciones. El 4-1-3-2 (flexible por cierto) sería el esquema madre más allá de los intérpretes.
Pero para enumerar concretamente. Peppino ocuparía el lugar de Valentini, quien falló en el cierre en el segundo gol de Desamparados. Después, Zarif, tantas veces utilizado como marcador de punta por el sector izquierdo, volvió a entrar en la consideración del entrenador, al menos para jugar desde el primer minuto. El Turco irá en lugar de Ricky Gómez.
Las mayores sorpresas aparecen en la mitad de la cancha, donde Carrizo retorna a la titularidad después de 11 partidos (su último encuentro desde el arranque fue por la 27ª fecha, ante Almirante Brown, 1-2). Será uno de los volantes adelantados, delante de la línea de Alderete, que irá en lugar de Vismara.
En la ofensiva también habrá un cambio sustancial. Porque más allá de la variante en sí, Pizzi se la juega por dos delanteros potentes, una apuesta con pocos antecedentes a lo largo del torneo (ver aparte).
Como dato complementario hay que mencionar que todos los futbolistas están a disposición y que aquellos a los que les tocó salir del equipo hicieron fútbol con absoluta normalidad, pero para el conjunto alternativo. Uno de esos casos es el de Medina, quien había sufrido un esguince de rodilla, pero del que ya está repuesto.
Ovación ya había dado cuenta en su edición de ayer que el técnico estaba analizando la posibilidad de realizar algunas variantes. El propio Pizzi fue el encargado de ratificarlo en la práctica de fútbol. Ahora, recién cuando la pelota se eche a rodar se sabrá a ciencia cierta si esas modificaciones finalmente sirven para cambiarle la cara a un equipo que mostró ciertas deficiencias desde el juego y que está obligado a revertir ese cuadro de situación en la última chance que se presenta para lograr el ascenso.