Los investigadores del crimen de Fernando Báez Sosa, el joven que fue asesinado a golpes por un grupo de rugbiers a la salida de un boliche de Villa Gesell, ordenaron realizar un peritaje para comparar el ADN de las manchas de sangre halladas en la vestimenta de algunos de los 11 detenidos por el homicidio con el patrón genético de la víctima. También llevarán adelante un análisis específicos para determinar quien le propinó la patada que le causó la muerte.
Fuentes judiciales aseguraron que además, se realizó en las últimas horas una extracción de sangre a los 11 imputados por el homicidio y las muestras fueron enviadas a la ciudad de La Plata, donde expertos en genética elaborarán los ADN de cada uno de ellos.
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Las pericias de ADN fueron pedidas ayer por la titular de la Unidad Funcional de Instrucción 6 de Gesell, Verónica Zamboni, quien solicitó además el cotejo entre las manchas de sangre halladas en zapatillas y prendas secuestradas durante el allanamiento realizado el sábado, y la sangre de la víctima.
Fuentes de la investigación indicaron que los resultados de estas pericias demorarán “entre una semana y diez días” y servirán para determinar la participación de cada uno de los detenidos en el ataque que causó la muerte de Báez Sosa el sábado último frente al local bailable Le Brique.
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Apuntaron además que los once imputados aceptaron “sin ninguna oposición la extracción” y mostraron “predisposición plena” con la investigación.