Los medios internacionales se escandalizaron unánimemente este martes, a solo doce días del Mundial de Qatar, con las palabras del ex exfutbolista y embajador de Qatar Khalid Salman. Dijo, en una mezcla de desconocimiento y homofobia, que la "homosexualidad es un daño mental", sin embargo pocos se perturban ante el silencio de Fifa o de jugadores internacionales por la organización de un Mundial donde estas palabras discriminatorias son ley.
A pesar de los discursos cargados de odio, el fotógrafo francés Emilien Buffard radicado hace nueve años en Rosario, presentará del libro-álbum de figuritas deportivas "Sport Friendly: ¡la cancha de la diversidad!", este viernes, a las 19, en la Alianza Francesa de Rosario (San Luis 846). Una opción inclusiva ante las codiciadas figus Panini, que salen un ojo de la cara.
¿Se imaginan qué vital sería para gays, lesbianas y trans que jugadores como Messi, Ronaldo, el polaco Lewandowski o el francés Benzemá le recuerden al qatarí que la Organización Mundial de la Salud (OMS) sacó de la lista de enfermedades mentales a la homosexualidad en 1990? ¿O que encabece esa simple aclaración el presidente de la Fifa, Gianni Infantino?
O alguien con popularidad y poder diga que allí "se pisotean los derechos humanos y se encarcela a la comunidad LGTBIQ+. El mundial al ser un evento internacional debería respetar pactos de instituciones como la OMS, de la que forman parte la mayoría de los países que allí compiten", aseguró Buffard en diálogo con La Capital.
Sí, solo sueños ingenuos para el mercado machista de fútbol de alta competencia. Pero ni Buffard, desde Rosario, ni cuatro organizaciones LGBTIQ+ bajaron los brazos ante el discurso del ex jugador qatarí ni del imperio futbolístico.
Convencidos de que "lo que no se nombra no existe", como dijo alguna vez George Steiner, salieron a la cancha este martes cuatro organizaciones LGBTI.
Protestaron ante el Museo de la Fifa en Zúrich (Suiza) con el fin de pedir una mayor defensa del colectivo ante el Mundial de Qatar, un país que según ellas pone "en peligro" la libertad de orientación sexual.
La Fifa, de brazos cruzados
"Las vidas de las personas LGBTI están en peligro en Qatar y la Fifa sigue de brazos cruzados, es por ello que debemos actuar como sociedad civil y aficionados al fútbol", se escuchó de boca del director de una de las organizaciones de la protesta, Justin Lessner.
Y Buffard también se calza los botines. Tras la muestra fotográfica Sport Friendly, que se inauguró en Rosario en abril y en mayo de este año en la Alianza y en el Museo Castagnino, vuelve al juego.
Ahora edita imágenes de aquella producción en un libro- álbum de figuritas deportivas de diversidad y presenta su producción, tras viajar por ocho provincias y retratar a 500 jugadores.
La síntesis queda plasmada en un texto federal con 50 jugadores, jugadoras y otros atletas de 30 agrupaciones deportivas inclusivas LGBTQI+ de toda la Argentina. Pero no se trata solo de imágenes "bonitas" y entrevistas sino de un compromiso social que alienta la inclusión en el deporte y en la sociedad y reinvindica el derecho de todas las personas a practicar un deporte y a ser valorado más allá de la orientación sexual, género, edad o grado de capacidad.
https://graph.facebook.com/v8.0/instagram_oembed?url=https%3A%2F%2Fwww.instagram.com%2Fp%2FCkI_w5TuVr2%2F%3Futm_source%3Dig_embed&ig_rid=24400f24-001c-4b9e-bbbe-f0b20de33819&access_token=EAAGZAH4sEtVABAAOeQmWM9rbL68HErdYjZBWVE9wMJ2gjGB113UrCvXlJWvd1JclUF8XDZC3ZBmWKZBP6B41ZBCn0eIPFKFe3AsGol67UxWghOSX5IfZBPxZB5MlbBkd5N587Kut6ZCOkqVQ499mCRv2bBYtlblipmGb8vfVbvmMEKx7sdg5suZCZBz6EEK89xlxZAIZD
"Los actos fuertes y simbólicos podrían cambiar el juego algún día. Cuando un jugador de fútbol que es adorado por todes les jóvenes diga 'soy gay', se producirá un verdadero cambio. Será necesario que todos sus compañeros digan alto y claro que su preferencia no cambia nada para ellos y que lo aceptan, para imponer respeto en la tribuna. Pero hay que atreverse", dijo Buffard.
Y eso viene ocurriendo pero a cuenta gotas. Tal el caso del voleibolista santafesino Facundo Imhoff (uno de los personajes aludidos por Buffard en su obra), quien dejó de lesionarse cuando pudo visibilizarse tal cual es.
>>>Leer más: "Visibilizarme me hizo mejor tipo y deportista"
De todos modos "salir del closet" es más común entre las mujeres deportistas, y no solo de fútbol, y casi un sacrilegio en el fútbol masculino de las grandes ligas.
Así lo demostraron la regatista rosarina Cecilia Carranza Saroli (campeona olímpica y campeona mundial, otra personalidad que incluye el trabajo de Buffard). Ella fue una de las mujeres que le hizo frente hace poco tiempo a la lesbofobia del deporte y de los medios al hablar abiertamente de su orientación sexual. Y también, recién ahora, pudo seguir ese camino la tenista Gabriela Sabattini.
"La lucha por la igualdad sólo puede ganarse con el apoyo de todas, todes y todos. Las personas heterosexuales, deben sentirse orgullosas de posicionarse como aliadas. Debemos adoptar una postura: contra la homofobia, la transfobia, la gordofobia. Si no dejamos pasar por alto ninguna discriminación y nos mantenemos unides, lograremos un mundo mucho más fuerte y enriquecedor", aseguró Buffard, quien nació hace 32 años en Saint-Aubin-de-Baubigne, un pueblito del noroeste de Francia, "von más vacas que personas", dijo al referirse a sus pagos de apenas 1700 habitantes.
Perder el próximo Messi
Cuando La Capital lo entrevistó en mayo de este año, en el marco de los Juegos de la Juventud, Buffard dijo que en su pueblo al igual que acá y en varias partes del mundo, "a los niñitos se los hacía practicar rigurosamente fútbol y a las nenas otro deporte donde las manos estuvieran en juego, y no los pies".
Con esas decisiones solo lograron alejarlo de los deportes, hasta que en un viaje en Rumania conoció a quien es hoy su pareja, un rosarino.
"Vine con 22 años, solo sabiendo tres palabras de español, pensaba que en Argentina y en Rosario habría muchas palmeras, ni idea por qué. Ni a Maradona conocía", confesó. Pero se quedó: ya es un rosarino más, sigue conviviedo con su pareja y se acercó a los deportes, desde su obra artística, que se expuso recientemente en Centro Cultural San Martín de Ciudad de Buenos Aires (CABA) y ahora se presentará y venderá en Rosario .
En Caba vivió una experiencia interesante al leer un comentario de una mujer en las redes, quien al ver una foto de su libro donde dos rugbiers se están dando un beso en la boca, en Rosario, con el Puente Rosario Victoria detrás dijo: "si llego a ver a mi hijo haciendo eso en un espacio publico, colorado le va a quedar el culo por las patadas que le voy a meter. Me sonrío con pena y ya lo dije en una nota. Tal vez por actitudes homofóbicas como la de esa madre, nos estamos perdiendo al próximo Messi, por ser gay".