La selección argentina comenzó perdiendo ante Bolivia en la altura de La Paz, logró dar vuelta el resultado y se trajo una victoria importante por 2-1 en la segunda fecha de las Eliminatorias Sudamericanas. Una victoria por la que el seleccionado debió esperar muchos años y por eso se entiende la celebración de los jugadores en el final del partido. Un final caliente, más típico de un partido de Libertadores que de Eliminatorias, pero en el que no faltaron las discusiones y las polémicas.
Al finalizar el encuentro, los jugadores bolivianos se quedaron muy enojados por haber perdido frente al equipo de Lionel Scaloni, mucho más cuando fue bien convalidado, mediante el Var, el gol de Joaquín Correa, que estaba en posición lícita.
Bolivia-Argentina. Messi vs. Pelado.mp4
Fue suficiente que se generaron un par de cruces dialécticos mediante al finalizar el partido para que los ánimos se tensaran.
Se vivieron momentos de tensión una vez que terminó el partido, entre los futbolistas de ambos equipos, al punto que debieron ser separados por los colaboradores y los árbitros del partido.
Uno de los que estaba con los ánimos exaltados era el delantero Marcelo Martins, autor del gol de Bolivia, quien reaccionó y al parecer cruzó un par de provocaciones con el volante argentino Rodrigo De Paul.
Ante esto, Lionel Messi no se quedó callado y fue uno de los que se quejó con los jugadores locales, que no pararon con las provocaciones.
Lionel también tuvo un cruce con el preparador físico del combinado local Lucas Nava y tuvieron que separarlos mientras la Pulga le decía: "La c... de tu madre... ¿Qué te pasa, pelado?".
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Si bien no parece quedar claro cómo comenzó el cruce, lo cierto es que se observa cómo Nava se acerca a Messi y éste lo increpa, mientras varios compañeros intentan sacarlo de ahí.
Inmediatamente después, un poco más calmos, Messi y Nava volvieron a cruzarse y la conversación fue captada más claramente por los micrófonos: "Estuviste gritando todo el el partido, boludo. ¿Para qué haces quilombo? Desde el banco estás gritando".
Después de unos minutos todo se tranquilizó y la situación no pasó a mayores.