Sukerman denunció que el municipio usó "violencia represiva" en el desalojo del club Argentino

El concejal Roberto Sukerman, precandidato a intendente por el Frente Justicialista para la Victoria, criticó hoy la decisión de la intendenta Mónica Fein de ordenar el desalojo de un sector del predio del Club Argentino de Rosario y disparó: "Es una vergüenza la forma en que la Municipalidad atropella a la ciudadanía".

"Cuando se trata de luchar contra el delito, las mafias y el narcotráfico no hay personal policial o municipal en ningún lado ni acciones en ese sentido", aseguró hoy Sukerman, en un comunicado conjunto con la edil Norma López, en el que calificó de "violento" el operativo que se llevo a cabo ayer en el predio de Sorrento y Travesía.

Asimismo, el concejal kirchnerista señaló: "La metodología utilizada donde se atropelló, golpeó a jugadores, directivos y familias del club, nos recuerdan a los peores momentos represivos de la historia argentina y a la conformación de un Estado que en vez de incluir, excluye; y que en vez de acercar a las partes, las aleja".

"Retroexcavadoras, topadoras, gran cantidad de efectivos policiales, Guardia Urbana Municipal y Control Urbano fueron el escenario del desmanejo del socialismo para encontrar soluciones", detalló Sukerman, quien cuestionó con dureza la metodología aplicada por el municipio ayer en el club de fútbol local.

Por otra parte, dijo que "cuando los vecinos piden seguridad y cuando se requiere la presencia del Estado en todos los barrios no podemos encontrar a la policía ni a la Guardia Urbana Municipal en ningún lado. No hay lucha contra el delito ni contra el narcotráfico y lo único que nos faltaba es la violencia represiva como metodología de Estado".

"Es increíble que para desalojar a un club donde juegan niños y centenares de personas participan activamente de su vida social, se realice un mega operativo con un impresionante despliegue de personal policial y municipal con topadoras incluidas", enfatizó.

Finalmente, destacó que "la Municipalidad debe hacer las cosas buscando el diálogo y el consenso pero lamentablemente actúa en forma violenta contra los más débiles, desprotegiendo a la ciudadanía en su conjunto. No puede avalarse que para obtener el predio se utilice desmedidamente a la fuerza pública, la destrucción de las canchas y alambrados y los golpes hacia directivos y familiares".