La cuestión sobre si es oportuno o no prohibir las clases presenciales desató más una polémica. No solo hubo cruces velados entre el jefe del gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y el gobernador de Buenos Aires, Axel KIcillof, sino que, además, al conocerse la decisión gubernamental hubo un cacerolazo frente a la Quinta de Olivos.
Pero el debate no quedó ahí, una declaración del presidente Alberto Fernández sobre los chicos con capacidades diferentes provocó el rechazo de las redes sociales y también de los expertos que trabajan en entidades médicas dedicadas precisamente a la atención de personas con discapacidad, disgustados con la opinión del jefe de Estado.
“Todo este tiempo he hablado con maestras de escuela de chicos con capacidades diferentes, de lo difícil que se les hace trabajar con esos chicos, que no entienden la dimensión del problema sanitario que enfrentan”, manifestó hoy el presidente Alberto Fernández en Radio 10 y explotó la polémica.
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Sus declaraciones causaron la reacción de la Asociación Síndrome de Down de la República Argentina (Asdra) que manifestó su rechazo en un comunicado en el que, en primer lugar, aclara que la expresión correcta es “personas con discapacidad” y que para hacer efectivos los cuidados, es necesario contar con campañas de salud nacionales.
Fernández usó la desafortunada expresión para justificar, entre otras decisiones anunciadas el miércoles pasado, la suspensión de las clases presenciales en las escuelas a partir del lunes 18 y hasta el 30 de abril, medida que no fue refrendada por los gobernadores, entre ellos el de la provinca de Santa Fe, Omar Perotti.
Asdra explicó “que la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad -Primer Tratado Internacional de DD.HH. del Siglo XXI-, requiere que los países identifiquen y eliminen los obstáculos y las barreras y aseguren que las personas con discapacidad puedan tener comunicaciones accesibles”.
"Un claro acto de discriminación"
En el comunicado, la entidad señaló que “las personas con discapacidad en todo el mundo, como el resto de la población, han comprendido a través de ayudas y apoyos (principalmente brindados por las familias) y han tenido que adaptarse a las medidas necesarias ante la actual situación de pandemia”. En este sentido, afirmó: “Expresar que no entienden la dimensión del problema sanitario es un claro acto de discriminación”.
“En entendimiento de la gravedad de la situación y de las diversas dificultades para lograr el cumplimiento de protocolos en cada ámbito, pide que las personas con discapacidad sean tenidas en cuenta en la formulación de políticas, tal como se lo manifestó en reiteradas oportunidades a la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis), que depende de la Secretaría de Presidencia de la Nación”, añadió Asdra.
Finalmente, pidió que las expresiones de los miembros de gobierno estén en sintonía con un enfoque de derechos, y que escuchen los reclamos del colectivo de las personas con discapacidad para que sean incluidas dentro del Plan Nacional de Vacunación (con especial atención a aquellas que son de riesgo) y se garanticen sus prestaciones básicas que hoy peligran por falta de actualización del Nomenclador (en el último año, y en el actual contexto inflacionario, solo hubo un ajuste del 10 % y no había desde 2019)”.