El presidente electo Alberto Fernández calificó ayer de "miserable" atribuirle "mover influencias" en casos judiciales, en respuesta a un artículo periodístico que lo relacionó con investigaciones penales "sensibles para Lázaro Báez".
El presidente electo Alberto Fernández calificó ayer de "miserable" atribuirle "mover influencias" en casos judiciales, en respuesta a un artículo periodístico que lo relacionó con investigaciones penales "sensibles para Lázaro Báez".
"En mi vida académica he trabajado con abogados que ejercen su profesión. @halconada sabe que en esa labor profesional yo soy absolutamente ajeno. Es miserable atribuirme mover influencias en esos casos. No voy a soportar en silencio la difamación hecha invocando hacer periodismo", escribió Fernández en su cuenta de Twitter.
Agregó que "en la Argentina que vamos a construir entre todos y todas se van a acabar los ‘operadores judiciales', los ‘operadores mediáticos' y los jueces y fiscales que ‘operan' para poderes mediáticos, corporativos o políticos sin impartir justicia como deben", y concluyó: "Sábelo @halconada".
Salió así al cruce de una nota de Hugo Alconada Mon en el diario La Nación. En la misma escribió: "En Bahía Blanca se dirime una de las investigaciones penales más sensibles para Lázaro Báez. Todo se encaminaba hacia los procesamientos... Hasta que después de las Paso, apareció un colaborador del presidente electo, @alferdez. ¿Tráfico de influencias?".
El periodista se refirió a la causa por un entramado de facturas truchas que desde Bahía Blanca benefició a Lázaro Báez. Y la sugerencia apuntó a Adrián Rois, el nuevo abogado defensor del dueño de Crediba, una financiera bahiense que está involucrada en la operatoria. El letrado es profesor de la cátedra sobre Teoría del Delito, que lidera Alberto Fernández, en la Facultad de Derecho de la UBA. Además, Sergio Massa lo nombró en 2016 como su asesor en la Comisión Bicameral de Fiscalización de los Organos de Seguridad Interior.
Por Tomás Barrandeguy
Por Carina Bazzoni