Una jueza en lo Contencioso Administrativo federal frenó ayer el traslado de un monumento de Cristóbal Colón, dispuesto por el gobierno nacional, tras una trifulca entre activistas de organizaciones no gubernamentales, dirigentes porteños y empleados nacionales.
En el episodio estuvieron involucrados legisladores porteños del macrismo quienes protagonizaron algunos forcejeos con empleados nacionales al oponerse al traslado a Mar del Plata de la estatua situada en un parque que se encuentra detrás de la Casa Rosada, donde se quiere emplazar otra de Juana Azurduy.
Los incidentes comenzaron cuando llegó una grúa y un container a esa zona, ubicada en la circular de la avenida de la Rábida con el objetivo de iniciar el traslado del monumento, ya que en ese lugar la presidenta Cristina Kirchner ordenó el emplazamiento de una estatua de Juana Azurduy de Padilla, donada por Bolivia en marzo pasado.
Al detectar estos movimientos, organizaciones sociales de defensa al patrimonio, como Basta de Demoler y Salvemos las Estatuas, se volvieron a movilizar para expresar su repudio, mientras que también se sumaron los funcionarios porteños, quienes rompieron el cerco dispuesto por efectivos de la Policía Federal y Gendarmería Nacional.
Los terrenos donde se emplaza el monumento, si bien están detrás de la Casa Rosada, son propiedad de la intendencia porteña. En ese marco, en la sesión ordinaria de ayer la Legislatura aprobó un proyecto del diputado de la Coalición Cívica Fernando Sánchez, que establece que "para sacar o poner un monumento en el espacio público de la ciudad es necesaria una ley de la Legislatura que lo apruebe".
Desenlace. Debido los disturbios que se generaron y a la presentación ante la Justicia que hicieron las organizaciones sociales, la titular del Juzgado Nacional en lo Contencioso Administrativo Federal número 12, Claudia Rodríguez Vidal, dispuso que no se traslade el monumento.
En ese sentido, según publicó el portal del Centro de Información Judicial, la magistrada le comunicó al Poder Ejecutivo Nacional que "deberá abstenerse de concretar cualquier acto que implique el desmantelamiento y traslado del monumento a Colón, que se encuentra ubicado detrás de la Casa Rosada".
Durante la tarde, legisladores del PRO, encabezados por el vicepresidente primero de la Legislatura porteña, Christian Ritondo, expresaron su repudio al traslado del monumento y denunciar el "robo del patrimonio de la ciudad".
Ritondo aseguró que el grupo disidente fue reprimido y aseguró que Lidia Rueda, presidenta de la Comisión de Cultura porteña, fue "golpeada y demorada en Balcarce 24", aunque luego se sumó a los legisladores del PRO.