Después de treinta años de relación y tres hijos, Mariana Nannis y Claudio Caniggia se separaron con un escándalo mediático en el medio, con denuncias por lavado de dinero, defraudación al Estado y acusaciones de violencia de género y familiar. Todo esto engrosa el expediente en la batalla que llevamn adelante en la Justicia por la división de bienes.
Sin dudas que la causa por abuso sexual simple que denunció la mamá de Charlotte, Alexander y Axel contra su ex pareja es la más compleja y grave. La misma se está investigando en la Fiscalía Nº 42, en el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Nº 18, a cargo del fiscal Carlos Arturo Velarde, donde la rubia presentó fotos de las agresiones que habría padecido del Pájaro.
El periodista Ángel de Brito, en su programa "LAM", dio a conocer las pericias realizadas por un equipo de psiquiatras y psicólogos a la supuesta víctima. En este informe se detallan las conclusiones a la que llegó la licenciada Silvina Virginia Alberino, quien entrevistó por Zoom a Nannis, que ahora está viviendo en Miami, Estados Unidos.
En el detalle del escrito elaborado por la especialista se indica: “Su modalidad en la comunicación es colaboradora, desenvuelta y correcta, respondiendo en forma cordial a las preguntas que se le formulan mostrando buena predisposición para la realización de la presente evaluación. Sus manifestaciones tienden a la verborragia con un detallismo poco productivo e información esencial pobre”. Asimismo, destaca que “sus referencias en relación a los hechos investigados van acompañadas de un tono emocional neutro observándose escasa resonancia emocional”.
Más adelante, en el informe se deja de manifiesto una historia de vida de Nannis marcada por una relación parental violenta, motivo por el que sus padres se separaron y por el cual Mariana cortó relaciones con su progenitor. Sobre su ex pareja, la denunciante declara que es “manipulador, psicópata, cocainómano, enfermo y violento”, sostiene en su discurso tal como lo hizo públicamente en otras ocasiones.
En tanto, la evaluación psicológica determina que Nannis tiene un estado de conciencia “lúcida, en tiempo y espacio con adecuada conciencia de situación”. También se indica que “no se observan trastornos sensoperceptivos al momento de la evaluación ni se infieren alteraciones de la exploración retrospectiva de esta función”. En cuanto a la memoria refiere que “se encuentra conservada, pudiendo recordar hechos recientes y pasados de su historia vital sin dificultad”. La experta destaca que “tiene tendencia a la dispersión y que el contenido de sus manifestaciones apunta a producir un impacto en el interlocutor con pobre nivel de fundamentación, con escaso nivel de autocritica”.
La forense también determina que con Mariana Nannis “no surgen indicadores de conflictiva emocional clínicamente significativa, sino de criterios mínimos indispensables para la conformación de un cuadro de estrés postraumático u otro trastorno psicopatológico vinculado con los hechos denunciados ni signos de victimización sexual o de maltrato”. Y señala que al momento actual “no se ven signos relevantes de la esfera afectiva, evolutiva, cognitiva teniendo en cuenta la personalidad de base de su rutina y estilo de vida. Sin perjuicio de ello, refiere sentimientos displacenteros acordes y razonables, vinculados a los acontecimientos que motivaron su denuncia en el contexto de una marcada distancia afectiva y escasa resonancia emocional”.