Pero lo dicho, a Ocon lo echaron intempestivamente antes del cierre del año, el rookie Jack Doohan no dio para nada la talla, y solo Gasly se mostró competitivo intermitentemente.
Eso le cabe al equipo y al A525 que se subirá Colapinto por primera vez, pero lo dicho, el momento que atraviesa Alpine está en directa relación con lo que pasa con el resto.
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Cinco equipos adelante de Alpine
Claramente, hoy Alpine está por debajo de al menos 5 de los otros 9 equipos que componen la parrilla de la Fórmula 1. Por supuesto, hoy McLaren está por encima del resto.
Fue ganando terreno durante el 2024, primero con uno discutido sistema de miniDRS de su alerón trasero y luego con la percepción de que encontraron la fórmula para refrigerar mejor sus neumáticos.
Aunque nadie es capaz de afirmarlo aún, habrían encontrado un material para los discos de freno que calientan hasta una determinada temperatura y después cortan. Casi como el agua cuando hierve, y es capaz de mantener constantes los grados por lo que se traduce menos calor de los discos hacia el neumático, manteniendo un mejor rendimiento del mismo.
Red Bull, con el talento del multicampeón Max Verstappen, se mantiene en la conversación pero claramente un paso más atrás y solo por el piloto, ya que Yuki Tsunoda no se le acerca, pese a ser más consistente que Liam Lawson, al que reemplazó tras las dos primeras carreras.
En el mismo nivel que el Red Bull que Verstappen, están los Mercedes. Sobre todo George Russell, mucho más consistente en carrera que el novato Kimi Antonelli, quien se ha mostrado muy veloz en clasificación.
Un pasito más atrás está Ferrari, que no puede hacer valer la incorporación del heptacampeón Lewis Hamilton, y no le alcanza con la mayor consistencia de su más mimado Charles Leclerc.
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A tal punto no le alcanza, que ya los Williams empezaron a discutirle el lugar, sobre todo con el más motivado Alex Albon, que dejó de cargar la mochila de ser el número uno del equipo y parece que le sienta mejor tener a otro de peso al lado y no a un Franco Colapinto. De hecho, Carlos Sainz, está un paso atrás suyo. Pero ambos al acecho de Ferrari y hasta entremezclándose más adelante.
¿Y el resto de la Fórmula 1?
Por lo dicho anteriormente, Alpine la tiene complicada. El aliciente fue que de las 6 carreras disputadas, Gasly metió Q3 en la mitad de ellas, lo que habla de su irregularidad.
El francés largó 9º en la Apertura de Australia, luego 5º en la cuarta fecha de Bahrein y de nuevo 9º en Arabia Saudita. Y sumó puntos con el 7º puesto de Bahrein y el 8º lugar del sprint en Miami.
Solo Gasly tres veces, dos veces los Haas (10º Oliver Bearman en Japón y 9º Esteban Ocon en Miami) y cuatro veces los Racing Bulls (5º Tsunoda en Australia; 7º Hadkar y 9º Tsunoda en China; 7º Hadjar en Japón), alteraron la situación de tener a esos equipos entre los diez primeros de la clasificación. Eso quiere decir que el compañero de Colapinto fue el mejor del resto.
Solo por Lawson en las dos primeras carreras con Red Bull y Tsunoda en la siguiente en Japón, además de Hamilton en la última carrera, los cuatro equipos top estuvieron siempre con sus dos autos en Q3. Las cinco veces restantes en que otro auto ocupó el top ten, fue Williams el que cedió el lugar, tres veces Sainz y dos Albon.
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Entonces, Alpine está claramente en el grupo de los cinco equipos restantes. Perdió inclusive al principio con Racing Bulls, pero desde que Tsunoda pasó al equipo principal, curiosamente sus autos no tuvieron la misma incidencia que al comienzo.
Se puede decir que se emparejó entonces con Racing Bulls y se mantuvo en el mismo tono que Haas. También podría decirse que, siempre con Gasly vale aclarar por si hay alguna duda, estuvo por encima de Aston Martin y más de Sauber.
Pero, con un insípido Lance Stroll porque Fernando Alonso chocó mucho y no sumó, Aston Martin dobla en puntos a Alpine, Haas está 13 puntos arriba y Williams en situación de inalcanzable, con 30 unidades adelante.
Gasly está 12º en el campeonato, se puede decir que en un lugar lógico, con 8 pilotos por debajo. Pero Alpine está penúltimo, apenas 1 punto adelante de Sauber, que sumó siempre con el veterano Nico Hulkenberg.
La comparación debe ser con Gasly
Llegar lo más pronto posible al nivel de Gasly debe ser el primer objetivo de Colapinto en cuanto a resultados, tanto en clasificación como sobre todo en carrera que es en definitiva lo único que importa.
Pero antes el argentino tiene un camino por recorrer inevitable: conocer el A525 lo más rápido posible, familiarizarse con su potencial y con el volante que tiene cerca de 30 opciones, y volver a adquirir ritmo.
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Una apuesta inteligente este viernes en Imola sería que Colapinto se dedique a girar y girar sin importar los tiempos. Que use toda la jornada para eso. Tal vez el sábado deba tomar más riesgos para ponerse a tono con la clasificación.
Por el auto que va a manejar que, se insiste, está de la mitad para abajo de la parrilla y tiene alrededor de 3/4 décimas menos por vuelta en el régimen del motor. Porque viene sin competencia en ninguna categoría, a diferencia de cuanto debutó en Williams. Porque le pusieron cinco carreras de tope, aunque se duda de que sea realmente cierto, es que Colapinto no la tendrá nada fácil en Imola.
A su favor, claro, tiene un circuito que conoce y donde festejó dos veces en F-3 y F-2, pero que en nada se comparará a la F-1. Y su talento innegable, que lo llevó en aquella primera vez, durante la FP1 de Silverstone, a quedar a menos de 4 décimas de Albon en una sola hora de conocimiento del Williams.
Estar lo más cerca de Gasly, tanto en clasificación como en ritmo de carrera, sería un muy buen comienzo (a menos de medio segundo). Mejorando eso, sería fantástico, como pasar a la Q2. Doohan lo hizo en la primera cita de Australia, aunque a 7 décimas y media del francés. Por eso, la evaluación debe ser completa, pero valdría mucho igual. Ni hablar si rasca puntos.
Para decirlo en criollo, Colapinto no tendrá las grandes condiciones que tuvo Kimi Antonelli en Mercedes, tampoco las peores de Gabriel Bortoletto en Sauber, pero debe superar los primeros obstáculos, del Alpine y propios.
Se espera que sea el inicio de una larga estadía en la Fórmula 1. Tiene muñeca para eso. Apenas dará en Imola el primer paso de este, su segundo capítulo en la historia grande del automovilismo.