Al menos 17 jóvenes sufrieron heridas ayer al ceder una baranda y caer de un primer piso en un boliche de la ciudad bonaerense de Ensenada, donde un grupo de estudiantes del colegio Estrada de La Plata realizaba una fiesta de egresados, informaron fuentes médicas y policiales.
El hecho se produjo alrededor de las 2.30 en el sector VIP del local bailable Block, ubicado en las calles 50 y 122, cuyo dueño calificó al accidente de "insólito", mientras que funcionarios municipales lo atribuyeron a "una avalancha en el escenario".
Fuentes sanitarias consultadas por la agencia DyN dijeron que la mayoría de los adolescentes, de entre 17 y 18 años, resultó con heridas leves, a excepción de dos chicas que sufrieron fracturas de la muñeca y el hombro, respectivamente, mientras una tercera permanece hospitalizada en observación a raíz de un traumatismo de cráneo.
"Todos están fuera de peligro tras ser asistidos en los hospitales San Martín y Gutiérrez", precisaron los médicos.
El director del hospital Gutiérrez, Luis Añón, informó que una adolescente de 17 años permanecerá internada entre 24 y 48 horas tras sufrir "un traumatismo craneoencefálico, con pérdida de conocimiento y una herida cortante en la frente". "Ahora se encuentra bien, pero deberá estar en observación", dijo.
El médico precisó, además, que "otras seis mujeres concurrieron al establecimiento con traumatismos de distinta consideración, pero fueron dadas de alta y permanecerán en observación ambulatoria".
En tanto, fuentes del hospital provincial San Martín, de La Plata, consignaron que debieron atender a una joven con una herida cortante en el codo, que fue dada de alta tras las curaciones.
También fueron asistidas allí otras cuatro mujeres y cinco varones.
El antecedente más cercano de un hecho de estas características se produjo el 10 de septiembre de 2010 en el boliche Beara, del barrio porteño de Palermo, donde el entrepiso del local cedió provocando la muerte de dos jóvenes.
El director de Inspección del municipio de Ensenada, Pablo Araujo, dijo que fue "una desgracia con suerte" y aseguró que el accidente se produjo por "una avalancha en el escenario, que tiene 1,80 metro de altura".
En tanto, Guillermo Ríos, dueño del boliche, estimó que el desprendimiento de la baranda de hierro "no fue por exceso de gente" ni tampoco por "conducta incorrecta" de los adolescentes, aunque reconoció que los estudiantes de la rampa "estaban eufóricos".
"La baranda tendría que haber resistido, estaba preparado para eso", sostuvo, y afirmó que el local "tiene habilitación para 1.100 personas y en el momento del accidente había unas 800".
El empresario consideró que "lo que ocurrió es insólito, no me da la cara para pedir disculpas a los chicos, no puedo creer lo que sucedió, pero los accidentes ocurren".
Ríos confirmó que el boliche fue cerrado en forma preventiva por la Municipalidad de La Plata hasta que se reacondicione el lugar y sea aprobada una nueva inspección, aunque aclaró que hace una semana fue inspeccionado y aprobado.
También destacó que la discoteca "cuenta con la habilitación vigente por parte de los bomberos y tiene el correspondiente seguro de responsabilidad civil".
Antecedente
El 9 de septiembre de 2010 dos jóvenes perdieron la vida tras derrumbarse el entrepiso de una discoteca ubicada en el barrio porteño de Palermo. Hubo también unos 20 heridos. Una testigo del hecho detalló que se había cortado la luz y “de repente, el entrepiso, que era de cemento, cedió sin aviso”. En el momento del derrumbe, según el relato de la joven, “no había muchas personas en ese sector, ni tampoco en el resto del local” porque había concluido la presentación de un grupo musical que convocó la fiesta.