Las jubilaciones serían actualmente un 32 % más altas si el presidente Javier Milei no hubiese modificado la fórmula de movilidad por decreto. Así, la jubilación mínima sería de $403.302 en lugar de los $304.726 actuales, según un informe del Centro de Economía Política de Argentina (CEPA).
El dato cobra relevancia en medio de la discusión por el aumento de haberes que promueve el Congreso y las acusaciones cruzadas con el gobierno. El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, ya confirmó que vetarán la iniciativa parlamentaria.
Bajo la premisa de que los jubilados no perderían más contra la inflación, en marzo de 2024 el presidente Javier Milei modificó por decreto la fórmula de movilidad jubilatoria y estableció que los haberes se actualizarán mensualmente de acuerdo al Índice de Precios al Consumidor que mide el Indec de dos meses atrás. En ese momento, también se otorgó una recomposición del 12,5 % por única vez.
El DNU que el gobierno mostró como una garantía de no perder más poder adquisitivo, también puede interpretarse como la imposibilidad de recuperar al menos parcialmente lo licuado en la última década. De acuerdo al documento del CEPA, desde septiembre del año pasado, los jubilados habrían tenido ingresos más altos si se hubiese aplicado la fórmula anterior, que combinaba la evolución de los salarios y la recaudación.
Al punto de que según los cálculos de CEPA, hechos en base a los datos del Indec y de la Anses, una jubilación mínima sin bono sería de $403.302, un 32 % más que los $304.726 actuales. El cálculo está armado en base a la mínima para establecer un ejemplo, pero bien podría replicarse sobre una jubilación media o sobre la máxima.
El informe señala que la clave está en el momento en que se modificó la fórmula: justo cuando la inflación comenzaba a desacelerarse y el mecanismo anterior a mostrar resultados favorables. En términos fiscales, el cambio le garantizó al gobierno que el gasto previsional no se dispare, pero le quitó a los jubilados la posibilidad de recuperar parte de lo perdido.
El bono que cobran los jubilados
El informe de CEPA también tiene un apartado para el bono, que se mantiene congelado en $70.000 desde marzo de 2024, pese a que la inflación acumulada supera el 127%. Según los cálculos de CEPA si fuese indexado al IPC debería estar en $158.000 para junio. Por lo que la pérdida mensual es de casi $89.000 por jubilado. El gobierno ya confirmó que no habrá actualización en lo que resta de 2025.
Según CEPA, en términos de poder de compra, las jubilaciones sin bono en el segundo trimestre de 2025 quedaron 3,1 % por debajo del último trimestre de la gestión anterior. Las que incluyen el bono, 15,7 % por debajo. En la serie histórica, la jubilación mínima actual está en niveles comparables a los de la década del 90.