El año pasado, Matías Bottoni tomó una decisión difícil para cualquier adolescente. Dejó la escuela Dante Alighieri, y a sus compañeros a quienes conocía desde la primaria, para cursar el último año de la secundaria en forma virtual. De esa forma iba a poder entrenar de mañana y de tarde para concretar su sueño de sumarse a los deportistas de la selección argentina de natación que participarán de los Juegos Panamericanos de Asunción 2025.
Ese sueño quedó en suspenso en la tarde del sábado pasado cuando, el nadador de 17 años representante del club Echesortu de Rosario, sufrió una lesión en la quinta vértebra espinal, en un desgraciado accidente que se produjo en la previa a una de las carreras del Campeonato Nacional Open de Natación que se disputó el fin de semana pasada en el parque olímpico de la ciudad de Buenos Aires.
Matías practica natación desde los tres años, un poco porque es el deporte que desde niño había practicado su papá, otro poco porque la familia consideraba que viviendo en una ciudad recostada sobre el río Paraná, su hijo debía saber desempeñarse bien en el agua. Seguramente, en ese tiempo, ni siquiera intuyeron que ese parecer calaría tan hondo en su hijo que pasó toda su infancia y adolescencia nadando.
Tenía sus metas claras. Así piensan sus compañeros de colegio que lo definen como un buen amigo, responsable, algo tímido, que dejaba las salidas temprano porque al otro día tenía que entrenar. Así lo destacan sus compañeros del club. "Un peleador", afirman. Así lo confirman sus entrenadores. "Un gran deportista, de elite", suman.
>> Leer más: En menos de 24 horas se juntó el dinero para la operación del joven nadador rosarino
Uno de los profesores que trabaja con Matías desde hace dos años lo describe como un deportista "súper aplicado", que nunca falta a los entrenamientos, que es siempre de los primeros en llegar y de los últimos en irse, muy sociable y muy buen compañero. En el club, todos lo querían, por eso mientras el nadador habla recibe varios mensajes preguntando por el estado de salud del adolescente.
Otro de sus entrenadores, que lo conoce desde los siete años, cuando desde Gimnasia y Esgrima pasó a Echesortu, agrega que Matías "es un deportista a nivel nacional que tenia el objetivo de entrenar para llegar al sudamericano en categoría juvenil. Es un excelente alumno, un chico tranquilo y muy aplicado" y no puede seguir hablando porque se le corta la voz.
Tan lejos llegó la pasión de Matías por la natación que, el año pasado, el adolescente decidió que se dedicaría al deporte full time. Por eso, rindió los exámenes para ingresar al secundario virtual que ofrece el Ejército, que brinda la posibilidad de cursar la escuela media a distancia a un destacado grupo de deportistas de elite.
Dejar a sus compañeros de la Dante, sus amigos de toda la vida, no fue fácil. Pero sólo de esa forma podía entrenar en forma intensiva en el Centro Nacional de Alto Rendimiento (Cenard). Su familia acompañó la decisión.
El campeonato argentino de mayores
Al campeonato argentino de mayores, Matías llegó representando al club Echesortu, junto a su entrenador. Había viajado el martes a Buenos Aires para participar de la competencia que empezaría ese sábado en el parque Olímpico.
>> Leer más: El accidente del joven rosarino Matías Bottoni conmociona al mundo de la natación
La de la tarde de la primera jornada del torneo era su última carrera. El juvenil estaba calentando y se tiró al agua sin advertir que otro nadador se había cruzado de carril. Chocaron sus cabezas y Matías tuvo una lesión en la quinta vértebra cervical que tocó la médula.
Inmediatamente fue asistido por el equipo médico del Hospital Santojanni, un efector público de la ciudad de Buenos Aires. Sin perder el conocimiento de la situación, el atleta tuvo su primer diagnóstico y la recomendación de una cirugía para descomprimir la columna y reemplazar la vértebra dañada. Sus padres, Luciano Bottoni y Valeria Grimaux, viajaron raudamente por autopista directo a la Capital Federal apenas recibieron el llamado sobre el accidente. El mismo sábado por la noche comenzaron los trámites para agilizar los tiempos y que la operación se hiciera en el Hospital Italiano, nosocomio al cual Matías arribó el domingo por la tarde.
Un deportista con todas las letras
Matías es el hijo mayor de una pareja de odontólogos. Había cumplido 17 años en febrero pasado. Tiene un hermano más pequeño, Ignacio de 11 años. Los tres estaban en su casa cuando recibieron la noticia que no esperaban escuchar: "Matías había sufrido un accidente en la pileta, estaba internado".
Sin que mediaran más explicaciones, emprendieron viaje a la ciudad de Buenos Aires, donde se encontraron con lo que consideraron "una pesadilla". Los médicos no lograban estabilizarlo y estimaban que la lesión no le permitiría volver a caminar.
Los medios especializados en natación se hicieron eco de la noticia ya que Matías era un deportista con proyección y era parte de los preseleccionados juveniles y que integró concentraciones de cara a los Juegos Panamericanos Junior.
La presidenta de la Federación Rosarina de Natación, Mónica Brochero, recordó que había participado de varios torneos internacionales, como el Torneo Promesas, del que participan deportistas de Argentina, Paraguay y Uruguay. También de varios eventos como parte de la selección nacional. El año pasado, fue subcampeón nacional en juveniles. Fue después de nadar 200 metros en estilo mariposa en sólo 2 minutos y 13 segundos.
La dirigente lo recordó como un deportista obstinado. "Un deportista de proyección. Un luchador, un pibe que nunca tira la toalla", dijo y recordó que este año había comenzado a cursar el secundario en forma virtual, para poder entrenar doble turno con el objetivo de llegar en forma a los Juegos Panamericanos, que este año se disputarán en Asunción (Paraguay).
La entidad rosarina que agrupa a los nadadores rosarinos federados se solidarizó con la familia y se hizo eco en sus redes de la campaña iniciada para cubrir los gastos médicos. Sólo la operación del adolescente tuvo un costo de 60 millones de pesos, por lo que se lanzó una campaña solidaria para recaudar el dinero y en menos de 24 horas se llegó al objetivo.
En los comentarios al posteo, sus compañeros de Echesortu y sus familias le enviaron cálidos deseos de recuperación. También de otros clubes como Provincial y Gimnasia y Esgrima de Rosario. Deportistas de todo el país, entrenadores, dirigentes de clubes y de federaciones mostraron su afecto. Hasta el reconocido nadador José Meolans le dedicó un posteo en sus redes sociales.
También sus ex compañeros de la Dante, que iniciaron una venta solidaria de pizzas para colaborar con la familia.
Operación y recuperación
Matías Bottoni, nadador del club Echesortu, fue intervenido quirúrgicamente con éxito tras sufrir un grave accidente en el Parque Olímpico de Buenos Aires. Ahora se comienza un proceso de recuperación que se espera que sea “largo y lento”, según comunicó la familia.
El deportista ingresó a quirófano del Hospital Italiano de Buenos Aires a las 8 de este lunes y ya se encuentra en terapia intensiva intubado y dormido, condición que mantendrá por 48 horas para estabilizarlo luego de la compleja operación a la cual fue sometido, contó a La Capital, Valeria Grimaux, madre de Matías, quien pasa los días junto a Luciano, su esposo, en un departamento a pocos metros del efector de salud.
Entre el miércoles y jueves los médicos intentarán despertarlo de a poco y comenzar con la recuperación. Se prevé que para los últimos días de la semana se hagan los primeros movimientos para sentarlo en una silla de rueda.