En un giro sorpresivo por no estar entre los principales candidatos, el estadounidense Robert Prevost será el nuevo Papa. El cardenal eligió como nombre León XIV y tiene una historia que lo liga estrechamente con Sudamérica.
Nació en Chicago y comenzó su tarea pastoral en Perú. Será el primer jefe de la Iglesia Católica nacido en Estados Unidos. Un repaso por su vida y obra
Robert Prevost será el primer Papa estadounidense en la historia de la Iglesia Católica.
En un giro sorpresivo por no estar entre los principales candidatos, el estadounidense Robert Prevost será el nuevo Papa. El cardenal eligió como nombre León XIV y tiene una historia que lo liga estrechamente con Sudamérica.
La elección de Prevost fue una de las sorpresas por no encontrarse entre los principales candidatos, permaneciendo entre los "tapados" y que cobró fuerza en las últimas 24 horas del cónclave.
Prevost comenzó su trabajo pastoral en Perú, por lo que tiene una estrecha relación con Sudamérica. Para su designación, eligió el nombre de León XIV.
Nació en Chicago el 14 de septiembre de 1955 y se lo conoce como un cura con mucha experiencia pastoral fuera del eje tradicional europeo, además de acercarse permanentemente a las periferias.
Fue ordenado sacerdote en 1982 y comenzó su tarea pastoral fuera de Estados Unidos, con sus primeros años en Perú, precisamente en la diócesis de Culucanas, al norte del país.
En territorio peruano hizo énfasis en una pastoral con eje en la cercanía, la formación de comunidades y la defensa de los derechos humanos.
Formó parte de la Conferencia Episcopal Peruana entre 2018 y 2023, de la que fue vicepresidente segundo, y fue administrador apostólico de la provincia del Callao entre 2020 y 2021.
Se ordenó como sacerdote en 1982, en Roma, y fue destinado a la misión de Chuculanas, en Perú, en 1986.
Tras ello regresó a su Estados Unidos natal, pero por poco tiempo ya que en 1988 volvió a Perú tras ser enviado a la misión de Trujillo, donde estuvo por diez años.
Más cerca en el tiempo, en 2014, fue nombrado como administrador apostólico de Chiclayo por el Papa Francisco.
Hace dos años fue designado por Francisco como prefecto del Dicasterio para los Obispos, un rol clave en la estructura vaticana ya que se convirtió en el asesor fundamental del Papa para la designación de obispos.
Especialistas marcan que tiene un tono sobrio y que antepone la cuestión pastoral a las posturas políticas. Además habla varias lenguas entre las que se marca un fluido español que deriva de su trabajo en Perú además de su estrecho acercamiento con Francisco.
Prevost es visto en el Vaticano como un valor para tender una especie de puente entre la parte institucional de la Iglesia y el sector popular de la misma, en un paralelismo que se puede trazar para acercar al norte y al sur global.
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Si bien fue un tapado hasta último momento, Prevost siempre fue la opción más equilibrada para acercar las dos partes más relevantes de la Iglesia.
Prevost se convirtó en el primer Papa estadounidense de la historia.
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